“El Garrahan se sostiene gracias a sus trabajadores, no al poder político: es exactamente lo que ocurre en la provincia de Buenos Aires”.
El pre-candidato a gobernador bonaerense por la lista del Frente de Izquierda – Unidad del MST -PO, Alejandro Bodart, visitó el Hospital Garrahan, recorriéndolo junto a la pre-candidata a la Legislatura en CABA, Cele Fierro, de su mismo espacio, y participó de un representativo encuentro de intercambio con trabajadores de dicho hospital. La anfitriona de la actividad fue la Lic. Norma Lezana, secretaria general de la combativa APyT (Asociación de Profesionales y Técnicos) de esa institución.
Bodart, explicó: “Los trabajadores del Garrahan son el verdadero sostén de este hospital emblemático, por ser el único de su tipo en alta complejidad para pacientes pediátricos. Por eso tiene un bien ganado prestigio nacional e incluso regional. Pero es su equipo de salud el que asegura esa realidad, no el poder político que le recorta presupuesto, que deja ir a especialistas irremplazables por los salarios que se cobran, y en definitiva porque reflejan a los gobiernos de turno que consideran este verdadero patrimonio social un gasto”. Además, en la recorrida del hospital hubo un rico intercambiamos con trabajadores de distintos servicios.
Finalmente Bodart completó: “El panorama que estoy constatando en la provincia de Buenos Aires en materia de salud es más alarmante de lo que pensaba. Kicillof hace campaña con eslóganes a favor de la salud; pero la falta de personal, los salarios que no alcanzan y fuerzan al pluriempleo y el desastre de los hospitales municipales, como el del Niño de La Matanza, por ejemplo, demuestran la política de vaciamiento del sistema de salud público. Por eso, nosotros decimos que la prioridad no tiene que ser el FMI o los subsidios a los ricos; sino una política de shock presupuestario para la salud como medida elemental de emergencia, salarios equivalentes a la canasta básica ajustada a inflación, infraestructura y los insumos que hagan falta. Estratégicamente, hay que ir a un sistema nacional único de salud, completamente estatal y a la producción de medicamentos genéricos, terminando con el negocio de la medicina privada y los laboratorios que lucran con la enfermedad de nuestro pueblo. Todo obviamente con control de sus trabajadores y con los recursos que hagan falta, no lo que ´sobre´ después de pagar deuda fraudulenta”.