Como se esperaba, el ministro Sergio Massa anunció en las primeras horas de la tarde la implementación de un nuevo “dólar agro”. Esta vez será a $ 300 –un 38% más que el valor del dólar oficial que está a $ 217.
Abarcará tanto a los productores sojeros como a las producciones de las economías regionales, todavía no hay precisiones si llegará también a las producciones de trigo y maíz de gran desarrollo.
En el marco del Programa de Incremento Exportador los sojeros tendrán este beneficio por 45 días, entre el 8 de abril y el 31 de mayo. En tanto, los productos exportables de las economías regionales gozarán de una ventana de 5 meses, hasta el 30 de agosto.
La medida, que está lanzada para fortalecer las alicaídas reservas liquidas – estarían en cifras menores a los U$S 2.000 millones- apunta a compensar la baja de la cosecha producida por la reciente sequía calculada en ingresos por U$S 20.000 millones menos. Es que además de las divisas necesarias para el funcionamiento de la economía, Massa tiene que juntar unos U$S 5.000 millones adicionales para cumplir con las metas de reservas del acuerdo –renegociado en este punto- con el Fondo Monetario.
Este dólar diferencial representa una devaluación parcial encubierta a favor de un sector de los más concentrados y poderosos de la economía: los grandes exportadores y productores del agro negocio. Son los que poseen las mayores cantidades de soja y que con sus súper ganancias de los años anteriores, entre ellas la que incrementaron con el dólar soja 1 y 2, tienen mucha espalda para soportar eventuales perjuicios de la sequía.
Por eso mientras en la previa a los anuncios de hoy, el viernes pasado reuniones hubo reuniones entre Massa, sus funcionarios y los grandes del sector como la “Sociedad Rural Argentina, la Federación de Acopiadores de Granos, la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC) y las Bolsas de Cereales de Buenos Aires y de Comercio de Rosario”[i], los pequeños productores han salido a criticar la medida.
Estos pequeños productores denuncian que no han sido alcanzados por ninguna de las medidas compensatorias de las pérdidas por la sequía que el gobierno anunció y que ahora Massa afirma serán de cumplimiento automático. Tampoco tienen producción disponible como para acceder a los beneficios de la misma, y encima el nuevo dólar agro “provocaría subas en los arriendos, en los precios de los alimentos y fertilizantes“, lo que “complicaría así a pequeños ganaderos, tamberos, agricultores tradicionales, agricultores familiares, y a todos los productores de las economías regionales”.[ii]
Los más perjudicados
Con todo y pese a los efectos de la concentración económica de una medida que para juntar las reservas para pagarle al Fondo beneficia a los grandes pulpos del sector, la más perjudicada será la población trabajadora.
A pesar de las distintas medidas que promete el gobierno para que los precios no suban, esta devaluación empujará para arriba la inflación por varias vías. Por un lado, porque la diferencia entre el dólar agro especial y el dólar oficial la pagamos todos. El Tesoro deberá emitir títulos –como en las versiones anteriores del dólar soja- para compensar al Banco Central. Estos títulos son más deuda y el costo de la operación tiene efecto inflacionario. Las dos versiones del dólar soja pasadas le costaron al Estado y fueron un beneficio neto para los empresarios sojeros de $ 330.000 millones.
Por el otro, el aumento de los costos para engordar el ganado para consumo de carne o para los tamberos, comprar los fertilizantes, etc. se termina pasado al precio final que pagamos todos.
En el caso del dólar agro destinado a las economías regionales, Massa anunció que se obligará a los beneficiarios a sumarse al programa de Precios Justos y deberán garantizar mantener el precio y volumen de los productos. ¡Olvídese de comer verduras, frutas o productos regionales! Imagínese, lector, si ahora los grandes empresarios exportadores de las regiones van a vender afuera a un dólar más caro, la verdulería va a ser más cara que la joyería del barrio.
Esa es la lógica de un país ordenado por pagarle al FMI una fraudulenta e impagable deuda. Massa, con tal de juntar los dólares que necesita amenazó a los empresarios que no liquidaron exportaciones por U$S 3.700 millones con sacarles el CUIT y que no puedan acceder al dólar oficial, cuando tendría que meterlos presos e incautarles todos sus bienes. Ah… si Ud. no tiene para comer… tenga confianza, que este es un país con grandes oportunidades, como nos repiten los funcionarios del FdT haciendo campaña electoral.
[i] “El Gobierno propuso un tipo de cambio a $300 para la soja del dólar agro”, La Nación 03/04/2023.
[ii] “El campo cuestionó el nuevo dólar agro: “Están empecinados en alargar una perversa saga de terror, es una equivocación imperdonable”, Clarín ‘5/04/2023