Entrevista a Patricio Grande, secretario adjunto de ADUNLu. Lista Naranja y Roja (minoría en la Comisión Directiva)
En el día de hoy, martes 6 de abril, hemos cumplido las primeras 24 horas del paro nacional en la UNLu y en cerca de 30 universidades a lo largo y ancho del país, en el marco de un paro de 48 horas que fue votado por el Congreso de delegados y delegadas de la CONADU Histórica, todos con mandato de base. En este se votó por unanimidad poner en marcha un plan de lucha a nivel nacional cuyo objetivo central es la urgente recomposición salarial.
Nosotros venimos sufriendo una perdida muy importante de nuestros salarios. Solamente a modo de ejemplo, en el último año hemos perdido más de 20 puntos con respecto a la inflación; el gobierno nacional incumplió una cláusula gatillo que debía cumplir a comienzos del 2020, que los trabajadores habíamos conquistado en 2019 luego de una intensa lucha que dimos en aquel momento. A partir de eso y de los magros acuerdos salariales firmados por las burocracias sindicales, nos encontramos hoy en esta situación donde se viene acumulando una gran pérdida salarial desde hace ya muchos años. Hoy nos encontramos, por ejemplo, que el cargo testigo que es el ayudante de primera, que trabaja 20 horas semanales en la universidad, que dicta clases, que trabaja en proyectos de investigación y de extensión, gana $ 23.000, claramente un salario de pobreza.
El epicentro de los reclamos tiene que ver con una urgente recomposición salarial que no debería ser inferior a un 50% porque todas las estimaciones, por ejemplo las del Banco Central, hablan de una inflación de entre el 48% y el 50%. Estamos exigiendo también la reinstalación de la cláusula gatillo, no queremos una cláusula de revisión sino una indexación automática de nuestros salarios.
También nuestro reclamo tiene que ver con las condiciones laborales, nuestras compañeras y compañeros docentes en la Universidad de Luján, pero también en el resto de universidades del país están trabajando desde sus hogares sosteniendo el dictado de clases, el desarrollo de proyectos de investigación y en definitiva sosteniendo la universidad pública, y no vemos que haya un apoyo del Estado que nos brinde presupuestariamente los recursos materiales necesarios parar sostener estas tareas. Hemos tenido que costear con nuestro propio salario todo el trabajo que hemos realizado el año pasado y que también estamos realizando este año con el ciclo lectivo 2021.
El paro viene siendo muy importante, con mucha adhesión de la docencia, que también ha sido votado por sindicatos de base que no son parte de la CONADU Histórica como el caso de la COAD, gremio de base de la Universidad de Rosario. Una enorme mayoría, más de 1.000 docentes, se pronunciaron a favor de sumarse a esta medida de fuerza; también hay docentes autoconvocados de algunas universidades nacionales, como el caso de la Universidad de La Rioja que están realizando el paro y están convocando a que más docentes se puedan sumar.
En este marco, nos enteramos en la tarde de hoy, a través de una clara maniobra entre las burocracias sindicales del sector, la FEDUN, CTERA, CONADU, UDA y FAGDUT, junto con el gobierno nacional y con los rectores, que tejieron una maniobra para convocar a la primera mesa paritaria, vencida hace más de un mes. Se convoca para el miércoles 7 la mesa de negociación, pero con la triste noticia, totalmente repudiable, que la CONADU Histórica es excluida de la misma por estar realizando un paro nacional en defensa de sus legítimos derechos laborales. Es por esto que estamos llamando a repudiar desde las asociaciones de base, desde la Federación y desde los distintos sectores este hecho que es una discriminación total y absoluta. Es la segunda vez en la historia que sucede esto, hay un antecedente similar en el 2015, donde por estar haciendo una medida de fuerza legítimamente votada por los y las trabajadoras, se nos excluye arbitrariamente de una negociación salarial.
Este es un hecho inadmisible, que tenemos que repudiar, que no puede volver a suceder. La CONADU Histórica tiene que estar sentada en la mesa de negociación porque es la asociación con más docentes del país y tiene una representación federal. Es un sindicato que tiene una línea general combativa, es muy importante que esto se difunda, que este repudio sea masivo y que mañana tomemos esto como algo importante para impulsar, para que más docentes se puedan sumar a esta lucha y que a finales de esta semana, las asambleas de bases de cada sindicato se reúnan y discutan para darle continuidad y profundidad al plan de lucha. Porque entendemos que para mejorar nuestro salario y nuestras condiciones laborales vamos a necesitar de la lucha y de la unidad en la acción de todos los que queremos defender nuestras condiciones de trabajo, pero también la universidad pública, y eso nos parece que tiene que ser un punto central en los reclamos sindicales de nuestro sector.
Se comprobó que la reunión paritaria del día miércoles 7 fue una absoluta truchada donde el gobierno nacional ofreció una suma absolutamente inaceptable del 33% de aumento salarial para 14 meses y a distribuir en 8 cuotas, una farsa que hasta las propias burocracias del sector tuvieron que salir a rechazar ya que fue totalmente irrisorio, para tratar de desmovilizar el paro de la CONADU Histórica que venía en ascenso.
En segundo lugar, en el día de hoy se realizó el Plenario de Secretarías Generales de la CONADU Histórica, donde cada una de las y los secretarios generales en función de los mandatos de asamblea y de Comisión Directiva, resolvieron profundizar las medidas de fuerza, profundizar el plan de lucha nacional, tal como había resulto nuestro Congreso a mediados de marzo. En ese sentido vamos a un nuevo paro nacional de 48 horas previsto para el próximo jueves 15 y viernes 16. Consideramos que es el momento fundamental para profundizar todas estas medidas de fuerza en todas las universidades el país, invitando a toda la docencia a ser parte de esta lucha, esté afiliada a alguna federación o no. Es el momento de sumar fuerzas y conseguir todas y cada una de nuestras reivindicaciones, no solo la cuestión salarial sino también mejoras en las condiciones laborales y también a las condiciones de estudio y de enseñanza de las universidades nacionales.
También en el marco del paro estamos convocando a que en cada universidad haya movilizaciones con las medidas preventivas sanitarias necesarias, pero que haya movilizaciones a los distintos rectorados para visibilizar todos nuestros reclamos.