En forma virtual, el lunes 30 se reunieron el ministro de Educación, Nicolás Trotta, el de Trabajo, Moroni y las conducciones de CTERA y los gremios docentes de la CGT. El Acta de esta Paritaria nacional, avalada por la burocracia docente sin consulta alguna a las bases, no es más que una declaración política de aval al conjunto de medidas del gobierno del PJ-Frente de Todos. Tanto en educación y en materia presupuestaria, pero también en salud, en la política social o la supuesta atención a la alimentación y la pobreza.
Un texto colmado de alabanzas hacia la política del gobierno y auto elogios, junto a una inexistente mejora salarial. Ya que el Acta se limita a ratificar la continuidad del pago de los $1.210 mensuales del FONID (Incentivo) y los $210 por Material Didáctico que se venían pagando. Lo único que les faltaba era acordar una paritaria donde se pagara menos que antes…
Nueva y bochornosa paritaria de “aumento cero”
La supuesta suba del mínimo salarial nacional no impacta en casi ninguna provincia. Hablan de un 10% de aumento en diciembre porque pasan de un inicial de míseros $25.000 a 27.500 pesos. Que, si en verdad lo cobrara alguien, implicaría poco más de $80 al día. Una vergüenza.
El Acta implica una escandalosa alabanza a toda la política educativa del gobierno de Alberto Fernández y su ministro Trotta. La burocracia vanagloria lo hecho este año, al afirmar en el punto a) del Acta, que la política del gobierno habría permitido garantizar –nada menos- que ¡el derecho [1] a la educación!
A su vez, en este punto a) se registra un guiño a la mendigante actitud de la burocracia, al decir que “el desafío frente al reinicio de actividades escolares presenciales, lo constituye un retorno seguro… siendo una prioridad las acciones de revinculación, reinserción y acompañamiento”. Es decir, más de lo mismo y peor.
Las loas a la política oficial de esta “dirigencia” sindical integrada al gobierno, se transforman en abierta mentira. Es que el punto b) del Acta asegura que “la sanción del Presupuesto Nacional da cuenta de la priorización de la educación y de la voluntad de iniciar el camino para alcanzar las metas previstas en la Ley de Financiamiento”. Cuando es claro que el Presupuesto es de ajuste, a pedido del FMI.
Además, la Ley de Educación Nº 26.206 establece que lo “destinado exclusivamente a educación, no será inferior al 6% del PBI” (Art. 9º). Pero este año, Trotta y Alberto Fernández junto a los gobernadores del PJ y la derecha, lo mantuvieron congelado en el mísero 4.8% del PBI que dejó Macri. Y planean una suba mínima, lejos del 6% que estipula esa ley; y del 10% del PBI que la CTERA y Adriana Puiggrós le exigieron a Macri del 2015 en adelante. Por eso, cínicamente, hablan de “iniciar el camino” de aumento presupuestario, aunque de forma muy lenta y paulatina en los 4 años. Lo opuesto a lo prometido en campaña y que Trotta le criticó a la derecha.
La hipocresía es mayúscula cuando hablan de un incremento de los presupuestos provinciales. Ya que el punto b) dice que el supuesto aumento del presupuesto nacional, “requiere el incremento de los recursos provinciales que se destinan a la educación”. Pero de inmediato lo invalidan, al decir que será “en tanto la situación económica y la realidad fiscal lo permita” en cada provincia. Es decir, nada.
El panegírico hacia el gobierno es total, cuando dedican el punto c) a ensalzar “el conjunto de medidas de asistencia y atención en la emergencia desplegadas por el gobierno nacional, provincias y municipios… que permitieron preparar los sistemas de salud, a la vez que se priorizó la atención de los más desaventajados, garantizando el derecho a la alimentación”. Inaudito.
Firmar esto es por demás escandaloso para una dirigencia gremial. No condice con los reclamos y fuerte lucha de enfermeras y profesionales de la salud. Tampoco con lo que vemos en las escuelas, al distribuir bolsones de alimentos. O en las incontables protestas de movimientos sociales combativos.
El punto d) pretende exculpar de responsabilidad al gobierno, al decir que “la situación socioeconómica continúa siendo aguda”. Y afirma algo más que alejado de la realidad: “la atención de los sectores con mayores dificultades para resolver sus necesidades básicas continúa siendo una prioridad”. Un escándalo para quienes dicen representar a la docencia, que ve crecer a diario la pobreza e indigencia en los barrios y escuelas, antes incluso de la pandemia.
El gobierno de los Fernández nunca otorgó un ingreso social de $40.000 para sortear los meses de cuarentena, apenas hubo unos pocos y míseros IFE de 10.000 pesos. A miles y miles de docentes reemplazantes o suplentes les negaron un cargo y trabajo, pese a estar presupuestados, pagando poco más que un plan social, sin ninguna estabilidad ni continuidad. O el ajuste sobre las jubilaciones de millones, también a pedido del FMI.
El Acta que certifica la traición en todo el 2020
El punto e), además de tratarse de una interminable enumeración de resoluciones oficiales, desnuda el pacto a espaldas de la docencia que venimos denunciando desde Alternativa Docente, junto a las conducciones Multicolor, combativas y de la FND. Se auto elogian al hablar de un “trabajo permanente de concertación en el Consejo Federal de Educación, que contó en todas y cada una de sus Asambleas con la participación de las asociaciones sindicales docentes”. Y de “los acuerdos construidos en el Consejo Asesor para la Planificación del Regreso Presencial a las Aulas…”. Es decir, no tienen empacho en dejar sus “deditos pintados” en este Acta, la que certifica la entrega y traición de todo este 2020 y en diciembre de 2019.
El punto f) excede el colmo, ya que se felicitan por haber cumplido “lo pactado en el Acuerdo Paritario del 24 de julio”, cuando inauguraron estas paritarias de aumento cero. Pero no se quedan ahí. Ya que destacan un mentiroso “diálogo o la negociación colectiva a nivel jurisdiccional”. Cuando la propia cúpula Celeste de CTERA ha venido denunciando la falta de diálogo, negociación e incumplimientos, en gran parte de las provincias. Como en Chubut, Chaco, Ciudad de Bs. Aires, Santa Fe, San Juan, Santa Cruz, Mendoza, Catamarca, por nombrar solo las que reconoce CTERA. Y se pueden sumar más.
El punto f) reivindica además a las provincias que gobiernan el PJ y la derecha, donde “se retornó a clases presenciales o se implementaron acciones de revinculación”. Cínicamente afirman que se “priorizó tanto la entrega de material tecnológico a estudiantes…”, lo que constituye un verso escandaloso. Al igual que reivindicar “la línea de créditos a docentes…”, en lugar de garantizar conectividad y dispositivos gratis a la totalidad de estudiantes y docentes que no la tienen.
Dicen también que se “fortaleció la formación docente”, cuando vemos los ataques de la ministra Acuña contra los 29 profesorados en CABA o la avanzada contra los IES en Catamarca y Chaco. Pero este siniestro punto f) no termina ahí. Ya que se felicitan por los más de 1.500 “proyectos de obra en establecimientos educativos” y las 19.528 escuelas con “solicitudes” de supuestas “transferencias directas para la adquisición de insumos básicos para la prevención en la etapa de retorno a clases”. ¿Vamos a tener las escuelas listas para el 2021? Naaaa!
Finalmente viene la supuesta mejora salarial, en el punto 1 que habla del “pago de una suma extraordinaria ‘FONID-suma extr.2020/2021’, a cuenta de FONID… en los meses de diciembre de 2020, enero, febrero y marzo de 2021”. Mucho palabrerío para seguir cobrando lo mismo que hasta ahora. Cero peso de aumento para el más de 1 millón de docentes del país. Lo que además certifica que, hasta abril o mayo de 2021 no habrá ningún “aumento”.
Por una nueva dirigencia, apoyar y preparar la lucha
Como venimos señalando, esta dirigencia traidora, integrada al gobierno de Alberto y el PJ, junto a gobernadores como Kicillof, no va más. El camino es impulsar la democracia de base y la autoconvocatoria para luchar. Haciendo como en Enfermería y en otros sectores sindicales y sociales que pasan por encima de las burocracias. Para poner en práctica un verdadero modelo sindical democrático y de lucha.
Hoy, más que exigir alguna lucha a estos burócratas, se les debería reclamar que retiren su firma del acta que acaban de acordar. Algo que difícilmente piensen hacer. Porque así cierran el año de traiciones, hacia un 2021 que también será de ajuste.
Desde Alternativa Docente, junto las conducciones Multicolor, con sindicatos y seccionales combativas e independientes y gremios de la FND, seguiremos dando pelea para acompañar cada lucha. Como el reclamo de SUTEBA Multicolor contra el Presupuesto de ajuste de Kicillof y la derecha bonaerense. Y la exigencia de renuncia a la ministra porteña, Acuña.
Junto a las protestas de docentes y estatales ante meses de atraso salarial en Chubut, acompañando el no a la minería contaminante. Los reclamos de reemplazantes y el rechazo al regreso a las aulas en Seccionales como AMSAFE Rosario. O las protestas en Chaco y Catamarca contra los ajustes. Para preparar las condiciones de lucha y no inicio en 2021.
Porque plata hay y debe salir de eliminar los multimillonarios subsidios a la Iglesia católica y demás confesiones y patronales privadas, de un verdadero impuesto progresivo a los ricos y corporaciones, así como del no pago de la deuda externa a los bonistas y el FMI. La deuda es con el pueblo, con los salarios, jubilaciones, la educación, por tierra, vivienda y salud. Por un Congreso Pedagógico Nacional resolutivo, para que docentes, estudiantes y familias definamos cómo transformar la escuela pública. Sumate a dar esta pelea con nosotres.
Alternativa Docente, en conducciones Multicolor, Combativas y la FND
ANCLA, Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática
MST en el Frente de Izquierda-Unidad
[1] a) El conjunto de estrategias, políticas y acciones desplegadas en el marco de la emergencia y la excepcionalidad que afectó al sistema educativo en su conjunto, por imposición de la Pandemia por COVID-19, permitieron garantizar el derecho a la educación y asegurar la continuidad pedagógica