Deuda con EEUU. Bessent: hacer lo necesario para apoyar a Milei

Luego de una semana estresante para las reservas del Banco Central, donde el gobierno gastó más de U$S 1.000 millones para que la divisa norteamericana no supere la banda, la búsqueda de un salvavidas hasta las elecciones ha sido la tarea constante de los libertarios. En medio de las especulaciones surgidas durante el fin de semana, en las que se hablaba de la posibilidad de un préstamo del Tesoro estadounidense (U$S 30.000 millones), aparecen los primeros guiños de la gestión trumpista. A horas de que Milei y Caputo viajen a EEUU, el secretario del Tesoro ya anunció que estaría dispuesto a ayudar a esta gestión. ¿Comienza un nuevo episodio de entrega recargada del país?

Como ha venido sucediendo desde hace semanas, la vida del gobierno continúa complicándose. El ministro Luis Caputo, con su “vamos a gastar todos los dólares”, lejos de tranquilizar a los mercados, terminó acelerando su reacción contra el gobierno. Durante los tres últimos días, el Banco Central perdió más de U$S 1.000 millones para intervenir en el mercado y que el dólar no superara la banda superior de flotación. Frente a esta situación, empezaron a surgir rumores sobre la posibilidad de reflotar aquella ayuda del Tesoro estadounidense, prometida por Scott Bessent (secretario del Tesoro) el pasado mes de abril.

Durante el fin de semana, se habló de un crédito del Tesoro cercano a los U$S 30.000 millones. Por ahora, el monto queda en el campo de los rumores. En las primeras horas de la mañana del lunes, el primero en referirse a este tema fue el canciller Gerardo Werthein, quien salió a desmentir la idea de este acuerdo. Pero casi en simultáneo, aparecieron las palabras de Bessent en una publicación en su perfil de X.

 “… el Departamento del Tesoro está dispuesto a hacer lo que sea necesario dentro de su mandato para apoyar a la Argentina”. Esas fueron algunas de las palabras del funcionario de Trump al referirse a la idea de respaldar económicamente a la gestión del presidente Javier Milei.

De acuerdo con las palabras del homónimo de Caputo, el gobierno estadounidense estaría dispuesto a apoyar a la Argentina a través de un Fondo de Estabilización Cambiaria (ESF, por sus siglas en inglés). El mecanismo con el que se realizará ese salvataje financiero no se conoce aún, pero de acuerdo con lo publicado por Bessent, las opciones podrían ser: “líneas de swap, compras directas de divisas y compras de deuda gubernamental denominada en dólares estadounidenses del Fondo de Estabilización Cambiaria del Tesoro. Las oportunidades para la inversión privada siguen siendo amplias y la Argentina volverá a ser grande”.

Posterior a esto, en su publicación de X, Bessent dejó en claro el posicionamiento que Estados Unidos tiene con respecto al futuro del gobierno de Milei: “Seguimos confiando en que el apoyo del presidente Milei a la disciplina fiscal y a las reformas pro crecimiento son necesarias para romper la larga historia de declive de la Argentina. Mis comentarios de abril dejan claro nuestro compromiso con el pueblo argentino y con Milei”.

Minutos después de la aparición de la publicación del secretario del Tesoro, la respuesta del presidente Milei no se hizo esperar. También por medio de X, el mandatario expresó su gratitud al funcionario trumpista: “Enorme agradecimiento a Bessent y Trump por el apoyo incondicional al pueblo argentino, que hace dos años eligió dar vuelta a un siglo de decadencia con mucho esfuerzo. Los que defendemos las ideas de la libertad debemos trabajar juntos para el bienestar de nuestros pueblos. Nos vemos el martes en Nueva York. ¡Viva la libertad, carajo!”.

Este ida y vuelta se realiza a horas de que la comitiva argentina despegue rumbo a Estados Unidos, donde, además de que el presidente participe en la Asamblea General de las Naciones Unidas y en la entrega de un premio, mañana martes se realizará una reunión bilateral con el presidente Donald Trump. Milei, acompañado por Werthein, Caputo y su hermana Karina, se encontrará con Trump, Bessent y el secretario de Estado, Marco Rubio.

Si bien lo del monto de la ayuda fue desmentido hace unas horas por el canciller Werthein, la publicación de Bessent abre un nuevo escenario. El gobierno, en medio de su mayor crisis, podría encontrar un respiro por medio del gobierno de Trump. Claro que ese aire para respirar equivale a un proceso de entrega y dependencia hacia el país del norte. Con un mundo reconfigurándose, y con un Trump que busca ampliar la intervención de su país en Latinoamérica, Argentina, con los libertarios a la cabeza, es un escenario para no desaprovechar por el imperialismo estadounidense.

Si el Fondo Monetario ya es una herramienta del imperialismo, donde por medio de reformas estructurales buscan insertar a países como el nuestro en una relación de dependencia hacia estas potencias, un acuerdo bilateral con Estados Unidos podría ser, directamente, la entrega total de nuestro país a los intereses de la gestión trumpista y el empresariado que lo rodea.

Las relaciones carnales del menemismo tuvieron consecuencias tremendas para el desarrollo del país y para las condiciones de vida de la clase trabajadora, caer bajo las órdenes de Trump podría tener consecuencias mucho más catastróficas. En medio de su disputa con las intervenciones chinas por estas latitudes, el gendarme mundial de Norteamérica no ve con malos ojos posarse sobre los recursos estratégicos de nuestro territorio.

Desde la llegada de Milei al gobierno, su alineamiento con Estados Unidos no ha sido una novedad. Ya han sido varios los funcionarios de Trump que han desfilado por nuestro país, como Bessent o el nuevo jefe del Comando Sur, Alvin Holsey, quien se dio el lujo de visitar la Base Naval de Ushuaia (punto estratégico militar y productivo del país). Ahora, dentro de pocos días, se instalará el nuevo embajador de Estados Unidos en nuestro país, Peter Lamelas, quien se dio el lujo de señalar a la izquierda como un sector a callar.

Frente a estas promesas de entrega, en donde un acuerdo con el gobierno de Trump podría representar la firma para nuestra esclavización a los intereses del capital norteamericano, es fundamental salir a repudiar y rechazar cualquier tipo de intervención política, económica o militar de esta potencia. Lejos de firmar algo con Estados Unidos, cualquier acuerdo que provenga de ese gobierno hay que romperlo y echar del país a cualquiera de sus funcionarios. El mismo destino hay que darle al FMI y a todas sus políticas de ajuste, donde los principales perjudicados son los trabajadores.

Mañana martes se verá el desarrollo de la reunión entre Milei y Trump, y tal vez se conocerán las primeras puntas de estas conversaciones. Frente a esto, y aprovechándonos de la debilidad actual de este gobierno, se vuelve fundamental echarlos con la fuerza mostrada en las calles, como sucedió el pasado 17 de septiembre. Dejar que este tipo de acuerdos coloniales avancen es sentenciar a las mayorías trabajadoras y a los sectores populares a trabajar de por vida para intereses extranjeros, además de rifar toda nuestra soberanía de una manera obscena.

Otras noticias