Estamos viviendo una epidemia en Argentina que no tiene precedentes. Superando los 180 mil infectados y más de 125 fallecidos, podemos decir que es la epidemia de dengue más grande, nunca antes vista en Argentina.
En los últimos 5 años los casos de dengue en nuestro país y en toda la región latinoamericana vienen en aumento. No es novedad para sanitaristas y epidemiólogos ver dengue en regiones caribeñas, centroamericanas o en el trópico. Sin embargo, comenzaron a observarse aumentos de casos en zonas donde antes no existían brotes preocupantes, como regiones subtropicales y otras zonas “frías”.
El origen de este fenómeno tiene dos aristas principales que analizaremos a continuación: la acción/inacción gubernamental y la crisis climática. El tardío comunicado del Ministerio de Salud de la Nación denota la inexperiencia en el tema, se excusa diciendo no saber si la vacuna contra el dengue sirve o no y no propone absolutamente nada para hacer al día de hoy.
Los gobiernos provinciales tampoco dicen ni hacen nada
Los primeros casos aparecieron en julio de 2023 (semana epidemiológica 32), sin embargo el aumento exponencial fue a partir de diciembre. Las guardias empezaron a notar un aumento veloz de personas con síntomas compatibles con dengue, a tal punto de triplicar o hasta quintuplicar las consultas por dicha enfermedad.
La política de los gobiernos para esa fecha fue completar la ficha de notificación obligatoria y extraer sangre para confirmación serológica. No hubo prevención, no hubo búsqueda activa casa por casa, no hubo descacharreo, corte de pastizales, control de foco, ni mucho menos distribución gratuita de repelentes, tules, mosquiteros o larvicidas. El equipo de salud es el mismo, no aumentó en ningún momento, no hubo nombramientos ni readecuación del funcionamiento de las guardias hasta fines de febrero.
Conocemos sobre el mosquito que tiene vida urbana, en el interior de los domicilios, que su vuelo es de 50 metros aproximadamente y que su picadura es diurna. Los mosquitos machos se alimentan del yugo de pastizales, por lo que mantener corto los céspedes hogareños y sobre todo de plazas, baldíos y espacios verdes es una medida fundamental pero olvidada por los gobiernos.
Es decir, estamos ante una epidemia sin precedentes, con número de casos nunca antes vistos, con colapso de unidades hospitalarias combinada con una inacción del gobierno provincial y nacional.
La crisis climática explica el origen de la invasión de mosquitos
Varias especies de mosquitos fueron creciendo y aumentando su cantidad y adaptabilidad a medios no comunes. Sin embargo, el aumento general de la temperatura y humedad permiten que el mosquito se desarrolle de sus etapas de pupa y larva con mayor velocidad. Su capacidad de multiplicación aumentó exponencialmente.
La cementación y crecimiento urbano suma su aporte. La destrucción de vegetación local para el desarrollo inmobiliario y urbano tiene regulaciones legislativas que exigen la deforestación para venta de lotes y terrenos, eliminando todo el ecosistema y equilibrio entre especies que son depredadoras de mosquitos como algunos artrópodos y otros insectos depredadores de larvas de los mosquitos. Todxs lxs que vivimos en zonas urbanas vemos cada vez menos dichas especies.
El desequilibrio ecológico trae estas consecuencias sobre la vida humana y de todas las especies y viene acentuándose por todas las formas de extractivismo capitalista, una forma de extraer recursos naturales para el enriquecimiento de una minoría privilegiada que deteriora el suelo, el aire, el agua, contamina el medio ambiente y destruye ecosistemas completos. Vemos hace varios años como los fenómenos naturales aumentaron en número y peligrosidad, inundaciones extensas, aludes en el norte por la deforestación, tormentas destructoras, oleadas de calor, veranos extensos, inviernos calientes, derrames de petróleo y destrucción de la vida marítima para a búsqueda de yacimientos petrolíferos.
Propuestas
Para los problemas de causas variadas necesitamos acciones integrales. Se deberían tomar medidas urgentes para el corto plazo y otras de corte preventivo para evitar futuros rebrotes, endemias en regiones nuevas y cambio de fondo en la matriz productiva.
Para trabajadores de la salud:
- Aumento de personal en guardias, pisos de internación y creación de nuevos espacios de atención específica separados por gravedad. Nombramientos a nivel municipal y provincial.
- Prevención de contagios intrahospitalarios, fumigaciones en interiores, repartición de repelentes para el personal y colocación de mosquiteros en ventanas de las instituciones sanitarias. El hospital tiene que ser un lugar libre de contagio.
- Aumento general de salarios y pleno reconocimiento de tareas exhaustivas durante la epidemia.
Primer nivel de atención:
- Campaña de prevención extendida en barrios populares con distribución gratuita de repelentes, mosquiteros, tules, colocación de carpas sanitarias y educación terapéutica.
- Búsqueda activa de febriles, casa por casa. Educación sanitaria, descacharreo y corte de pastizales en plazas, veredas, baldíos y espacios verdes.
- Fumigación selectiva en interiores para control de foco, con rastreo epidemiológico.
- Vacunación gratuita a toda la población
Para atacar el origen del problema:
- Control y planificación de viviendas urbanas, así como de lotes y áreas verdes. Evitar fumigaciones en áreas públicas y abiertas que, además de no ser lo más efectivo, destruyen todas las especies que equilibran el crecimiento de mosquitos.
- Transición ecológica de los medios de cultivo, basta de monocultivo que destruye el suelo, no alimenta, envenena, destruyendo la vida terrestre local.
En resumen entendemos que el origen de los problemas sanitarios, epidemias, pandemias del último siglo, vienen de la mano de un modelo productivo que genera cambios en la vida terrestre, con extinción de especies, destrucción de suelos y agua y peligro inminente de toda forma de vida. Originó 2 pandemias en menos de 20 años y hoy la epidemia de dengue en nuestro país. Por lo tanto para combatirla es necesario combinar las medidas sanitarias urgentes con las medidas de transición ecológica prohibiendo el extractivismo de todo tipo que enriquece a un puñado de ricos empobreciendo y enfermando a las mayorías populares. No hay más lugar ni tiempo para medidas tibias y parciales, es urgente y necesario tomar un rumbo diferente como sociedad, involucrándose activamente en la política, con planificación conjunta con trabajadores y usuarios de la salud, exigiendo un sistema de salud único, científico, de calidad para todxs, con producción pública de medicamentos, para una sociedad justa, concebida en términos socialistas.
Dr. Raul Laguna Bosch, Alternativa salud, Sec. Organización CICOP
Bibliografía consultada
1.Boletín oficial 11 y 12, Ministerio de Salud de Nación y PBA
2.El Cambio Climático y las Enfermedades transmitidas por vectores, Sociedad Argentina de Pediatría.
3.OPS, WHO
4.Evaluación de los impactos del cambio climático sobre la salud Economía del cambio climático en la Argentina Aníbal E. Carbajo
5.El cambio climático empuja el dengue hacia Europa y Sudamérica. ONU, 2023
6.Factores socioeconómicos y ambientales asociados a la incidencia de dengue: estudio ecológico en Costa Rica, 2016
7.Global vector control responde 2017-2030, World health organization. 2017
8.Libro: “Investigaciones sobre mosquitos en Argentina. Capitulo predadores de mosquitos”, Fischer, Byttebier, Campos, 2016