El viernes el equipo de profesionales del Hospital Laura Bonaparte (Ex CeNaReSo) se enteraron del cierre de las internaciones y los ingresos de la guardia y demanda espontánea a partir de ese día, y el rumor de que el lunes se efectiviza el cierre total del hospital, institución de referencia en materia de salud mental y adicciones a nivel nacional.
Esta política criminal del gobierno de Milei, a días de que asumió su nuevo ministro de Salud Lugones, ratifica el objetivo de atacar a la salud pública en general y a la salud mental en particular, dejando 600 trabajadores en la calle y a la deriva a miles de pacientes.
Ataque a la salud y a todo lo público
El plan del gobierno ha demostrado que quiere destruir todo lo público. Desde que asumió el golpe al sector público ha sido brutal, miles de despidos, cierre de áreas de atención y asistencia, recortes de ayuda social, desfinanciamiento de las universidades, el veto a las y los jubilados, y por supuesto en el área de salud despidos, recortes y ahora intenta lo que solo la dictadura hizo: cerrar un hospital.
Ya hace algunas semanas en las conferencias de prensa, el vocero Adorni nombró al Hospital Laura Bonaparte como uno de los posibles hospitales que tenían que dejar de ser nacionales y pasar a las jurisdicciones donde están. Eso fue un alerta como así también el despido de 30 trabajadores en los últimos meses, pero la noticia del viernes no se la esperaban. Esto pone en riesgo a las y los pacientes que hoy permanecen internados en el hospital, además de quienes no van a poder acceder a su atención los próximos días.
La respuesta que hace falta
Las y los trabajadores del Bonaparte no demoraron ni dos horas para empezar a organizarse. Rápidamente fueron convocando a través de comunicados, de las redes sociales y desde los contactos que lleva el trabajo que realizan desde hace años también de tipo comunitario y con pacientes, que a las 17 horas fueran miles quienes estaban acompañando la decisión de sus profesionales: toma del edificio hasta el lunes. En asamblea, sus trabajadores junto a todos los sectores que fueron a apoyar definieron la permanencia, como así también las comisiones que empezarán a funcionar y distintas actividades para el fin de semana para seguir abrazando el hospital.
La coordinación con otras luchas que se están dando en salud como así también con otros sectores fue parte de lo que se expresó en la asamblea. Estuvieron compañeras y compañeros de distintos gremios, como los compañeros y compañeras de la APyT del Garrahan que vienen dando una dura pelea contra el gobierno nacional, estuvieron también compañeras enfermeras de la comisión directiva de ALE, también de la Junta Interna de ATE INCAA y muchos más sectores que reflejaron la necesidad de dejar de pelear cada uno en su lugar y dar la pelea de forma conjunta contra el gobierno. Sin dejar de exigir el paro general que hace falta, sabiendo lo cómplices que son las direcciones burocráticas hay que pasarles por arriba, y si no es con ellos es con autoconvocatoria y organización de quienes sí están luchando.
Lo que perdemos con el cierre de Bonaparte
Este hospital nacional de referencia, único especializado en salud mental y adicciones para niñez, adolescentes y adultos, tiene un nivel de atención importantísimo que hoy quieren cerrar:
- Guardia interdisciplinaria las 24 horas.
- 0800 de urgencia las 24 horas.
- Atención de demanda espontánea de 8 a 20 horas de lunes a viernes.
- Consultorios externos: Psiquiatría, Psicología, Trabajo Social, Enfermería, Terapia Ocupacional, Musicoterapia, Pediatría.
- Internación y cuidado de urgencia, con equipos interdisciplinarios.
- Hospital de día.
- Trabajo en redes con articulación con efectores de salud de todo el país.
- Atención de salud integral: medicina general, ginecología, obstetricia, dolor, laboratorio. odontología, nutrición kinesiología, farmacia.
- Residencias interdisciplinarias y capacitación a profesionales en todo el país.
- Jardín para hijes de trabajadores.
- Centro cultural: con talleres, emprendimientos socioproductivos, radio, biblioteca, muestras de arte.
Además, este cierre implica:
- Dejar sin atención a 25.000 pacientes al año.
- Dejar en la calle a 662 trabajadores.
- Dejar sin respuesta a 35 personas internadas.
- Dejar sin jardín a 80 niñas y niños.
Todo el apoyo a las y los trabajadores y pacientes del Hospital Bonaparte
Este fin de semana tenemos que seguir rodeando de solidaridad, abrazando el hospital y el lunes hacer una fuerte presencia contra el cierre. Compartimos las redes donde van a estar publicando todas las acciones para sumarse
Alternativa Salud/ANCLA/MST