Con muchísima adhesión, trabajadores de la Embotelladora del Atlántico (Coca- Cola) han parado totalmente la producción de la planta, con toma del establecimiento desde hace 24 horas en reclamo de recomposición salarial.
La dura situación económica que atravesamos en el país afecta a todos los trabajadores. Con más de un 100% de inflación anual, los salarios se encuentran cada vez más golpeados. Mientras tanto, el gobierno pacta con las principales centrales sindicales, como la CGT, un techo salarial de apenas el 60%. De esta forma no hay sueldo que alcance.
Los trabajadores de la planta embotelladora de Coca-Cola en Córdoba así lo vienen denunciando. Con un salario básico de apenas 170 mil pesos, el acuerdo paritario cerrado a principios de año fue de un amargo 16% hasta junio. A esa situación se le suman los descuentos por el mal llamado impuesto a las ganancias aplicado al salario, que termina afectando directamente los ingresos de los trabajadores.
Coca-Cola es una de las multinacionales más grandes del mundo y viene de multiplicar sus ganancias en los últimos años. Sin embargo, el salario de sus trabajadores viene en caída. Para graficarlo, los huelguistas denuncian que históricamente el salario de un trabajador de planta rondaba los 2.000 dólares, mientras que hoy apenas llega a los 700.
Frente a todo esto los trabajadores de la planta se organizaron en asambleas de base y definieron tomar acciones para realizar el reclamo. Primero con algunas manifestaciones en la puerta de la fábrica y finalmente con el paro y toma de la planta, resistiendo la conciliación obligatoria y manteniendo las medidas por la recomposición salarial y para que la empresa absorba los costos del impuesto a las ganancias.
Mientras escribo estas líneas, permanecen reunidos algunos representantes gremiales en el Ministerio de Trabajo. A la espera de la respuesta se encuentran decenas de compañeros y compañeras del lado de adentro y de afuera del enrejado, bancando la medida y con la perspectiva de discutir entre todos cómo se sigue de acuerdo a lo que surja de la reunión.
Familias, amigos y organizaciones políticas, como el MST en el Frente de Izquierda Unidad nos acercamos en solidaridad con los huelguistas. También llegó a prestar solidaridad la legisladora por el MST Luciana Echevarría, quien puso a disposición la banca para acompañar la lucha de los trabajadores.
Desde Periodismo de Izquierda y el MST acompañaremos el reclamo hasta el final.
Lautaro Allassia