La docencia de Córdoba viene exigiendo desde mediados de Mayo la urgente reapertura de paritarias. El acuerdo cerrado el 18 de Marzo hasta Febrero 2026 se demuestra insuficiente, porque era un acuerdo que no resolvía lo perdido en 2024 (estimado en un 30% del poder adquisitivo) y se planteaba igualar la inflación, con lo que consolidaba la enorme pérdida salarial del período anterior. Pero además, luego de firmado el acuerdo, cambiaron las proyecciones inflacionarias del REM.
Al respecto el Observatorio del Salario informa: “el escenario macroeconómico se ha modificado: no solo que las tasas de inflación en estos meses han resultado más elevadas que las que se esperaban al momento de la firma del acuerdo, sino que además el REM publicado por el Banco Central corrigió al alza las expectativas de inflación para los próximos meses. (…) Para una maestra de grado inicial, la Serie Original de la Paritaria 2025 preveía entre enero y septiembre de 2025 una mejora real acumulada del 2,2%, que sería compensada o revisada en octubre. Sin embargo, bajo la Serie Actualizada post Paritaria, ese incremento se transforma en una caída del 2,6%, producto del mayor ritmo inflacionario” .

Además del difícil escenario salarial, la docencia viene afrontando una reforma educativa inconsulta, que implica un aumento significativo de las tareas administrativas, un recorte de contenidos que termina reduciendo la educación a un carácter meramente instrumental, para formar mano de obra barata recortando espacios y materias, lo que limita aún más los horizontes de las y los estudiantes. Esto afecta directamente las condiciones laborales docentes, observándose una sobrecarga laboral muy significativa que repercute en la salud de la docencia.
Si a todo esto le sumamos los ataques a la educación desde el gobierno nacional, con la quita de la paritaria nacional docente, el desfinanciamiento completo de la educación vaciando programas y quitando el FONID, más el intento de declarar la esencialidad de la educación, tenemos un panorama complejo, que requiere una respuesta contundente y a la altura de las circunstancias.

Lamentablemente, una vez más, las conducciones sindicales de CTERA y UEPC Provincia, se han limitado a sacar comunicados o algunas acciones aisladas, convirtiendo así a los sindicatos en parte del engranaje del ajuste. Sobre todo al dejar aisladas las luchas docentes en numerosas provincias como Santa Cruz, Catamarca, Tierra del Fuego, Río Negro, Misiones, La Pampa, La Rioja o Buenos Aires que la CTERA debería unir en un paro y plan de lucha nacional contra el ajuste de Milei, el FMI y los gobernadores como Llayrora, convocando a la Marcha Federal Educativa junto a la universidad, el hospital Garrahan, el SUTNA, las y los jubilados y demás luchas en curso.
La actuación de la Delegación Capital de UEPC
Ante esta realidad la delegación de UEPC Capital inició un camino de debate junto al cuerpo de delegados/as. En asamblea se deliberó y decidió un plan de acción que en primer término exigía a la conducción celeste de UEPC provincia asambleas escolares, mandatando a la Delegación Capital de UEPC a convocarlas si la celeste provincial no lo hacía. Desde Alternativa Docente impulsamos y defendimos la necesidad de estos espacios de debate en cada escuela, como instancia necesaria para evaluar junto a la docencia los pasos a seguir. Entendíamos que incluso a pesar de los riesgos de sanción o descuentos que podía implicar la realización de asambleas escolares, ya que la celeste había informado que quitaría el aval gremial a las mismas, era necesario impulsarlas como forma de comenzar a desafiar los límites que nos impone la burocracia sindical celeste y el gobierno. La realización de las asambleas movilizó a todas las escuelas, que fueron sorteando obstáculos para poder realizar mandatos. Pero movilizó sobre todo a la burocracia de la UEPC provincial, que salió con los tapones de punta a militar contra las asambleas.
A tal punto que sacaron un comunicado público afirmando “La Asamblea Provincial de Delegadas y Delegados Departamentales, instancia máxima de resolución de nuestro sindicato, y la Junta Ejecutiva Central con posterior aprobación de la Asamblea Provincial, son los únicos órganos que pueden resolver medidas de acción directa y/o asambleas horarias. Ninguno de estos órganos dispuso asambleas horarias. En caso que se realicen, no están contempladas por nuestro estatuto gremial, son ilegales y pueden implicar sanciones. En tiempos de avasallamiento de derechos, cuidemos las herramientas sindicales y a las y los trabajadores de la educación”.

De esta manera se ubican directamente como patronal, amenazando a los propios trabajadores a los que dicen cuidar, con sanciones y descuentos. Llegando al colmo de pretender declarar “ilegal” una acción docente elemental como hacer una asamblea escolar, cosa que muy pocos gobiernos patronales se han animado a hacer, salvo en dictadura.

Es un accionar muy grave, porque el propio sindicato le da herramientas al Ministerio de Educación para que salga a presionar pidiendo las listas de docentes adherentes a la medida. Un escándalo que fue ampliamente rechazado por la docencia, y que llevó a que la asamblea de delegados/as votase una movilización en repudio hacia la UEPC Provincial.
Es importante considerar que realizar asambleas en el lugar de trabajo es un derecho democrático básico, amparado en la ley 23.551 de Asociaciones Sindicales en su artículo 4º que afirma que reunirse y desarrollar actividad sindical, es un derecho sindical que tenemos los trabajadores. Al quitarle el aval gremial, la UEPC Provincia convierte en ilegal una acción que no lo es.
Asambleas y un nuevo cronograma de lucha
Este accionar tuvo lógicas repercusiones en las escuelas, generando desigualdad en las posibilidades de llevar adelante las asambleas. En la mayoría de las escuelas se sortearon los obstáculos impuestos, y los delegados/as armaron mandatos en recreos o durante el almuerzo. Esta desigualdad muestra la necesidad de emprender un trabajo de fortalecimiento de la organización de cada escuela, para que una próxima instancia nos encuentre en mejores condiciones de afrontar los aprietes y amenazas.

No obstante estas dificultades, una nueva asamblea de delegados, con 330 asistentes, aprobó un nuevo cronograma de lucha, con múltiples acciones que culmina con la convocatoria a una gran movilización a casa de gobierno a la vuelta del receso escolar de invierno. Porque plata hay en la provincia y el país: debe ir a educación y salarios, no al pago de la estafa de la deuda al FMI y los bonistas buitres, ni en subsidios millonarios a las privadas o poniendo un impuesto real a la riqueza.
Si algo muestra toda esta experiencia que la docencia de Capital va haciendo, es que tanto el gobierno como a la burocracia celeste, tienen mucho miedo de la organización de las escuelas y de que la Delegación Capital logre algún nivel de autonomía. En ese camino tenemos que trabajar, apostando a convertir la bronca en organización y lucha. Para dar esta pelea te invitamos a sumarte a Alternativa Docente!.
Alternativa Docente Cordoba