Ayer 19 de febrero se divulgaba la noticia de que Javier Galván, el ex novio de Ivana Módica quien llevaba desaparecida una semana, había cambiado nuevamente su declaración en cuanto a los hechos sucedidos el día de su desaparición. Hoy salimos a las calles en reclamo de justicia para ella, para Úrsula, y por todas las mujeres asesinadas.
La enorme concentración se llevó a cabo a las 17 hs. frente al Patio Olmos, con corte completo de la calzada de la calle Irygoyen. Fue convocada por la Asamblea Ni Una Menos y asistieron todas las organizaciones que la conforman, familiares de víctimas, y autoconvocadxs.
Javier Galván, ex novio de Ivana, en primer momento había declarado que el día de la desaparición él se había ido a trabajar a las 6:30 hs. y cuando volvió al mediodía Ivana ya no estaba. Luego se desmintió esa declaración ya que una patrulla rural vio el auto de Galván en una zona distinta a lo declarado. Debido a esto y a que Galván ya tenía una denuncia por parte de Ivana, la jueza decidió trasladarlo a Bower. Mientras era trasladado, decidió declarar el asesinato. Así fue como ayer se encontraba el cuerpo de Ivana en la ruta nueva del Camino del Cuadrado al kilómetro 11,5.
Javier Galván era piloto de la Fuerza Aérea. Este se convierte en un nuevo femicidio por parte de una Fuerza Armada del Estado, y en el séptimo femicidio del año en la provincia de Córdoba. No es casual que Galván, aun teniendo una denuncia, siguiera estando libre y cerca de ella, sino que fue amparado por el sistema judicial.
Por eso, con la movilización reclamamos justicia para Ivana, para Úrsula y para todas. Uno de cada cinco femicidios en el país son cometidos en manos de miembros de las fuerzas armadas del Estado; por eso en el discurso de cierre de Viki Caldera, compañera de Juntas y a la Izquierda, se escuchó una política clara: hay que disolver la policía y todo el aparato represivo, y elegir por voto popular a todos los jueces y fiscales, con mandato revocable. Todo esto sabiendo que hay un sistema que sostiene las desigualdades y las violencias, el sistema capitalista y patriarcal.
Gabi Perri