A partir de la irrupción del movimiento estudiantil con toda su fuerza en el conflicto universitario, las direcciones docentes y del Frente Sindical se vieron obligadas, por un lado, a dar respuesta a las bases que presionaban por una radicalización de las medidas, y por el otro, a intentar desactivar y desconocer lo que se gestaba por abajo en el marco de los acuerdos con el CIN y la FUA, negados al desborde.
Plenario conjunto de CONADU y la Histórica: unidad para la desarticulación
El pasado viernes 25 de octubre estaba convocado un plenario nacional de la CONADU Histórica, se suponía que antes habría un encuentro conjunto con la otra CONADU y el FAB (Frente de Asociaciones de Base, sector díscolo de la misma), algo que ya se ha hecho en otras ocasiones, de forma simbólica con un saludo o unas palabras previas. Pero el jueves 24 a la noche recién se blanquea que en realidad sería un “plenario conjunto” con las asociaciones de base de cada federación. Así llegamos al viernes con un plenario conjunto donde no se podía mocionar ni votar, con un documento que sólo había acordado la conducción mayoritaria de las dos CONADU’s y el anuncio del paro del 30 que también estaba previamente establecido, una acción que en muchos lugares la burocracia sindical, presionada por las bases, terminó acordando para descomprimir.
La Histórica viene jugando un papel de “lavada de cara por izquierda” del Frente Sindical, bloqueando las acciones de los sectores combativos que vienen gestándose por abajo. En ese sentido tanto el PCR, con el apoyo de la Verde y aliados, han presionado para que la federación no se ponga al frente del conflicto que más ha erosionado al gobierno de Milei. En ese sentido, con la excusa de la unidad y de la “institucionalidad” de la representación sindical y estudiantil, la Histórica se ha negado sistemáticamente a proponer de forma contundente las medidas de acción que las bases votábamos en asambleas cada vez más masivas. En vez de posicionarse como una alternativa real para los sectores docentes que quieren luchar, la conducción mayoritaria de la federación apostó, y apuesta, a una unidad orgánica, burocrática y por arriba con la otra CONADU, en consonancia con las CTA’s. Pero este acuerdo no tiene por objetivo la construcción de una verdadera herramienta de lucha al servicio de la clase trabajadora, sino que se organiza en torno al “hay 2025”, algo que ya vivimos en 2018 y 2019, apostando a variantes del peronismo, un proyecto que ya demostró sus limitaciones y fracaso y que nos dejó de regalo a Milei.
Esto quedó demostrado en los discursos que se expresaron en el plenario conjunto del 25 de octubre, cuyos puntos centrales fueron: la unificación de las CONADU’s, en línea con lo de las CTA’s, como dijimos; la necesidad de una tercera marcha federal a la cual nadie le puso fecha; apuntar a construir un proyecto político alternativo al gobierno de Milei (nacional, popular, del peronismo, etc.); y la necesidad de reencauzar la lucha universitaria a las Mesas, los frentes, los acuerdos de las conducciones, es decir, todo por arriba y nada por abajo. De hecho, fue tal el perfil político que quisieron imprimirle a ese plenario que como referentes estudiantiles dieron el saludo estudiantes de Patria Grande, Barrios de Pie y Peronismo Militante y no convocaron a los sectores de izquierda, autoconvocados e independientes que venían sosteniendo las tomas y las asambleas masivas.
El documento del plenario, que la mayoría leyó por primera vez ahí, expresaba la necesidad de realizar acciones regionales y de movilización, sin definir marcha contundentemente. Y al final convocaron a una foto con las manos levantadas mostrando una votación simbólica diciendo que “siempre se vota en los plenarios, mostremos nuestras manos alzadas”, en el marco, repetimos, de que habían negado la posibilidad de mocionar y votar las propuestas que las asociaciones de base llevábamos. Tenemos que estar atentos porque si la unificación de la que hablan va a ser desarmar los órganos de deliberación para hacer una mesa de decisión, es una profundización de la burocratización. Y también porque este alineamiento total con el peronismo explica las maniobras políticas que desde la conducción de la CONADUH vienen haciendo para desarmar las acciones.
Congreso de la Histórica: consolidación del planchazo
Entre ese plenario y los Congresos (Ordinario y Extraordinario) de la CONADU Histórica pasaron dos cosas centrales: la interuniversidades se reunió el sábado 26 en CABA y votó la fecha del 12 de noviembre para la 3° Marcha Federal; posteriormente a eso se publicó un nuevo comunicado del Frente Sindical que estableció el “Tour del planchazo”: una serie de acciones aisladas regionales que inició en La Plata y finalizaría el 22 de noviembre con un “Encuentro por la Gratuidad Universitaria” en Buenos Aires, pasando por Cuyo (6/11), Salta y Catamarca (7/11), Mar del Plata y Comahue (8/11), Rosario (11/11), Chubut (12/11), Tucumán el 13, Córdoba y Misiones (14/11), el 15 sur y noroeste del conurbano bonaerense.
Este comunicado fue difundido por todas las conducciones del Frente y tuvo una repercusión negativa entre los sectores de la CONADU Histórica que no están directamente alineados con la verde o el PCR, aunque no sean de la Multicolor, ya que no eran las acciones que se venían discutiendo, ni siquiera en el plenario conjunto que había tenido lugar 4 días antes. Al momento de debatir y deliberar el viernes 1, estas acciones ya estaban publicadas por todos lados, dando a entender que estábamos frente a un hecho consumado sin discusión y desconociendo las asambleas en todo el país que estaban discutiendo el 12 como fecha para la marcha federal.
Por lo tanto, asistimos a un Congreso Extraordinario donde íbamos como Multicolor a disputar la votación de las acciones, con un documento acordado que reivindicaba el 12 y denunciaba los métodos por los cuales la conducción mayoritaria imponía un planchazo con las acciones regionales y un festival en 20 días, pusimos en cuestión la unidad a toda costa con la burocracia de las gestiones, de las federaciones y de los estudiantes mientras le damos la espalda al movimiento estudiantil independiente, en lucha y combativo.
Debates al interior de la Multicolor: ¿alternativa real sí o no?
La Multicolor como reagrupamiento de la izquierda docente y el activismo combativo es un frente único muy importante. Sin embargo, a lo largo del conflicto de este año ha tenido, como mínimo, un desarrollo errático y no ha logrado perfilarse claramente como un factor de impulso real por abajo junto al movimiento estudiantil combativo, delimitándose realmente de la conducción de la Histórica.
Lamentablemente han primado las ubicaciones superestructurales haciendo que no se pueda construir realmente un frente cuyo perfil sea claramente antiburocrático, de oposición y como lo que debería ser: una alternativa real en CONADUH.
En ese sentido, su intervención ha insistido en “cambiar de contenido” a algunas definiciones de la mayoría en la Histórica, una concepción que lleva al fracaso, en vez de reafirmar una línea propia cuya hoja de ruta empalme con las definiciones más combativas del movimiento estudiantil y docente, como la Marcha del 12. Es evidente que en este punto tenemos debates, visiones diferentes, y no compartimos las últimas definiciones en el marco del Congreso Extraordinario de la Histórica, que se impusieron sin debate dentro de la Multicolor, un método de los hechos consumados, que nos libera de hacer públicas estas críticas.
En ese sentido, entendemos que la Multicolor debería haber sostenido la moción del 12 a pesar de no tener la mayoría de votos. Porque al cambiar la moción sin consulta, la burocracia se organizó para refrendar lo actuado por la conducción de la CONADUH y dio por terminado el congreso aplaudiendo la “unanimidad”. Todo esto luego de haber levantado argumentos burocráticos en nuestra contra que iban desde la institucionalidad de las conducciones hasta la queja porque de pronto “un sector del movimiento estudiantil que no gana las elecciones de la FUA y los centros” nos impone una fecha. Así, la resolución del congreso fue que la Histórica lleve “como propuesta” al Frente Sindical que el 22 se realice la marcha. Lamentablemente el resultado de esto es que la publicación de las resoluciones del Congreso muestre exactamente lo que quería la burocracia: unidad en todo, refrendando lo actuado sin consultar y celebrando la confluencia en un “Festival en Plaza de Mayo” el 22 con una propuesta de marcha, es decir, toda la línea que ellos querían. Por eso, si el Frente Sindical se niega a convocar esta marcha tenemos que exigir que la Histórica apoye y se ponga al frente de organizarla.
Tareas y desafíos: construir nacionalmente una tendencia de izquierda en CONADUH
Es evidente entonces que necesitamos ampliar el debate sobre la intervención como oposición, para poder contribuir realmente a un curso consecuente con la lucha e independiente de la mayoría de la Histórica. Para eso hace falta fortalecer en la Multicolor una tendencia de izquierda que unifique a los sectores que, como Alternativa y muchos independientes, vemos con urgencia esta necesidad. La explosión del conflicto universitario luego del veto no fue solo estudiantil, también la docencia se sumó masivamente a las asambleas y a discutir ampliamente el plan de acción que necesitamos. Esto debe ser un llamado de atención para las conducciones porque también expresó la disconformidad de cómo se venía organizando el plan de lucha. Pero sobre todo es un llamado para la Multicolor que construir con esos sectores un perfil claro de oposición de izquierda junto al movimiento estudiantil combativo. Milei nos ha declarado la guerra y no hay lugar para tibiezas ni mucho menos para maniobras que patean al 2025 la lucha. Es ahora y es ya, como lo demostró el movimiento estudiantil antiburocrático y los sectores que siguen luchando a pesar de las burocracias y el peronismo rosquero y antidesborde. Convocamos a docentes e investigadores de todo el país a encarar juntos esta tarea.
Sofía Cáceres Sforza – Secretaria General SITRADU – Alternativa Universitaria