Mientras el FMI cogobierna el país, Unión por la Patria y Juntos por el Cambio se alinean frente al mismo modelo de ajuste, extractivismo y criminalización de la protesta social. En Chubut se profundiza la precarización de la vida que recae con mayor peso sobre les trabajadores: el gobierno de Arcioni-Sastre es responsable de la pulverización de los salarios estatales y del progresivo cierre de plantas y fábricas, lo que ha elevado los índices de desocupación y pobreza, todo ello para presionar por una zonificación minera que el pueblo rechazó rotundamente en las calles.
El programa económico del oficialismo no dista mucho de aquel que presenta la oposición mayoritaria, que es continuar con la dependencia petrolera y profundizar la matriz primario-extractivista de nuestra provincia. A ello debe sumársele el endeudamiento serial en dólares, que hoy asfixia las cuentas publicas, del que solo el pueblo paga sus consecuencias. Esto demuestra una clara voluntad a futuro de saquear aún más el territorio y entregarlo al mejor postor, sin propiciar espacios y proyectos productivos sostenibles ni planes de obra pública que ofrezcan trabajo, salario, salud y educación para les de abajo.
En este contexto se realizan las elecciones provinciales y se hace evidente que expresiones como las de Luque (Arriba Chubut) y Torres (Juntos) no son alternativas; sino que representan los mismos intereses: el de los sectores concentrados de la economía, grandes capitales nacionales e internacionales que se reparten la riqueza que produce el pueblo trabajador y que extraen de nuestra tierra. Queriendo presentarse como algo distinto aparece el candidato de Milei, el empresario Treffinger, que dice que rechaza la megaminería pero que quiere mano dura y promete fortalecer la misma policía que golpea, persigue y asesina a los pibes de los barrios, y que además reprimió al pueblo cuando salió a defender el territorio. Son conocidas las expresiones de odio que se promueven desde ese espacio político, odio contra la clase trabajadora, odio contra las mujeres y la comunidad LGBTTIQ+, odio racista contra los pueblos y comunidades originarias. En definitiva, lo que buscan es ir contra todos los derechos que con la lucha feminista y antirracista hemos logrado alcanzar.
Todo esto demuestra que más allá de los partidos o las candidaturas, existe entre estas fuerzas políticas un verdadero consenso, que es el de un modelo económico centrado en la destrucción de la naturaleza y el saqueo de los bienes comunes fundamentales para la vida como lo es el agua. Ese consenso es en alianza con el poder financiero internacional, para extraer las tan mencionadas “energías renovables o verdes” con la excusa de la “transición energética”, que no es otra cosa que más extractivismo.
Es claro que para la meseta solo piensan en ofrecer megaminería, para la cordillera monocultivo de pinos y latifundio; y en la costa vía libre para las grandes pesqueras a las que en la actualidad prácticamente no se controla y mucho menos a grandes capitales como Aluar. Es necesario tener muy en claro que todos los candidatos antes mencionados representan y defienden los intereses de los poderosos y ricos de siempre, esos que pretenden seguir hambreando y reprimiendo a les de abajo para aumentar sus ganancias.
Por esto, es que llamamos a votar a la candidata a gobernadora por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad, Emilse Saavedra y a les distintes compañeres que integran las listas para legisladores. Acompañamos la lista del FIT-U porque entendemos que es necesario fortalecer una opción anticapitalista y por el cambio social, y que se proponga construir espacios de participación popular y se posicione del lado de les trabajadores para conquistar las luchas por mejor salario, vivienda, trabajo, salud y educación.
A su vez, sostenemos nuestra vocación de construir desde abajo los espacios de organización y de lucha, para construir unidad de la izquierda más allá de lo electoral. Sabemos que para enfrentar las políticas represivas, defender el agua, la tierra, el trabajo y los derechos alcanzados por la clase trabajadora a lo largo de la historia es necesario articular y construir alianzas duraderas y con raíces profundas, pero también plurales en la perspectiva anticapitalista. En esa tarea nos encontramos.
FOL – FAR – Marabunta, Corriente Social y Política – Poder Popular – Corriente Política de Izquierda