domingo, 7 julio 2024 - 11:51

Capital Humano y los alimentos retenidos. Casación falló contra Pettovello

El pasado martes 2 de julio, la ministra Sandra Pettovello que encabeza Capital Humano recibió otro revés por parte de la Justicia. La Cámara de Casación Penal rechazó la apelación presentada por el equipo legal del Ministerio, por lo que la ministra tiene que repartir las 5 mil toneladas de alimentos retenidas en galpones.

La Justicia vuelve a poner a Pettovello en primera plana, luego de que la sala II de la Cámara Federal de Casación Penal resolviera mantener firme la decisión del juez Sebastián Casanello. En primera instancia se había exhortado a la ministra a repartir los alimentos guardados en los galpones ubicados en Villa Martelli (Buenos Aires) y en Tafi Viejo (Tucumán).

Para el Ministerio, la apelación contra la decisión del juez Casanello violaba la división de poderes y el pedido del diseño de un plan de distribución de alimentos se trataba de una “intromisión judicial en política de gobierno”. Pero para los magistrados Angela Ledesma, Guillermo Yacobucci y Alejandro Slokar la nueva apelación presentada por Leila Gianni, subsecretaria legal de Capital Humano, “no logra rebatir de modo concreto y acabado los argumentos expuestos en la resolución impugnada”.

Sobre la cuestión de que este caso tenga rumbo hacia la Corte Suprema, los jueces expresaron: “La parte no ha argumentado adecuadamente la existencia de una cuestión federal que habilite la intervención de esta Cámara como tribunal intermedio, en los términos de la doctrina establecida por el Alto Tribunal”.

Con este fallo la Cámara de Casación Penal determina sostener la causa en la que se investiga a Pettovello por abuso de poder y violación de los deberes de funcionario público debido a la retención, ilegal, de más de 5 mil toneladas de alimentos, con el detalle sustancial que una gran parte de la mercadería se está venciendo.

Con la profundización de esta crisis el único movimiento que hizo Pettovello con su ministerio en esto meses fue la de una distribución discrecional de mercadería a sectores cercanos al gobierno. Un ejemplo de esto fue como la fundación CONIN, liderada por el ultraconservador de Abel Albino, fue una de las pocas organizaciones que recibieron alimentos, una decisión que afecta directamente a los comedores populares que tienen mayor inserción barrial que la fundación dirigida por el antiderechos.

Con la pobreza que afecta a más de la mitad de los argentinos, la estigmatización hacia las organizaciones sociales y el discurso demagógico de los comedores truchos que tiene el gobierno empieza a tambalear luego de esta seguidilla de golpes que viene sufriendo la ministra de Capital Humano. En este contexto de crisis por el que las mayorías están transitando, es urgente que se retome la entrega mensual de los alimentos para los comedores populares y merenderos, ya que estos son los únicos lugares donde las barriadas muchas veces encontraban su único plato de comida en el día.

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