Así lo definió la Cámara Federal de Casación Penal, liberando a Ángelo Calcaterra, primo de Macri, de la causa de coimas conocida por los “cuadernos de Centeno”.
Esta definición la tomo la justicia el 19 de junio, resolviendo que los pagos de Calcaterra se realizaron a razón de “aportes voluntarios”, tanto para la campaña electoral de 2013, como la del 2015.
De esta forma los jueces Daniel Antonio Petrone, Diego Barroetaveña y Carlos Mahiques, fallaron a favor del primo de Macri y de Sánchez Caballero, otro de los 31 investigados, enviando su caso al fuero electoral.
Esos aportes no están registrados en ninguna parte, por lo cual sigue siendo un delito, no obstante, al pasarlo al fuero electoral, se “suaviza” la causa y la pena puede ser una multa y/o la imposibilidad de ejercer cargos públicos.
Es un logro de los amigos del poder, que dibujan las causas de corrupción y coimas, siendo la Justicia cómplice, que avala este tipo de mecanismos.
Para la corrupción y la estafa no hay grieta, esta causa nace investigando al kirchnerismo en el 2018 y termina asociando al primo del ahora, presidente del PRO, como a otros empresarios importantes, algunos de ellos defendidos por el actual ministro de Justicia, Cuneo Libarona.