Este viernes 28, el gobierno de Orrego llevó a cabo, en todas las escuelas de San Juan, la jornada sobre la propuesta de alfabetización que el gobierno nacional de Milei quiere llevar adelante en todo el país.
Pretenden resolver la crisis que atraviesa la educación, producto de las políticas de ajuste anti educativas de los distintos gobiernos, con un programa que únicamente hace hincapié en la comprensión lectora. En esta jornada se propuso pensar la alfabetización como actividad trasversal a todas las materias y en todos los niveles educativos.
En el material denominado “Comprendo y Aprendo”, pueden verse cifras de relevamientos que dice el gobierno provincial haber realizado sobre la fluidez lectora en estudiantes de primaria y secundaria. Según este relevamiento entre estudiantes de 3° grado, 6° grado y 1° año, un 25% aproximadamente tendría un nivel crítico de lectura fluida, un 35% aproximadamente sería de nivel básico, mientras que de un 25% al 30%, en nivel medio y un 15% sería el avanzado.
Con los datos que da el gobierno provincial, más allá de la veracidad de los mismos, los docentes somos conscientes y así lo expresamos en la jornada, de la crisis educativa existente. Por eso venimos demandando soluciones de fondo que, en esta instancia, no han sido planteadas.
Porque las políticas educativas que, desde hace más de 80 años llevan adelante distintos gobiernos, son las responsables de que tengamos una educación pública en crisis. La habilitación de subsidios a las privadas por el peronismo en 1947, la transferencia de las escuelas a las provincias con la última dictadura genocida, completada después por Menen y el PJ, su ley Federal de Educación, más la nueva Ley de Educación Nacional o la Ley de Financiamiento Educativo; todas estas leyes nos llevaron a la crisis educativa que hoy tenemos. Pero de todo esto no se habló.
La docencia como principal responsable…
El desarrollo de los materiales y videos que componen la jornada hacen énfasis en volver a un viejo sistema de educación, el cual no queda claro cuál es. Como parte del balance de la crisis educativa, el objetivo de esta instancia era poner bajo la lupa el trabajo docente.
En una segunda parte, se reproduce una entrevista a una de las impulsoras de la propuesta, la investigadora del Conicet Valeria Abusamra, que también es miembro de la Fundación Varkey (la corporación más grande a nivel mundial de escuelas y jardines privados que regentea el magnate Sunny Varkey, que tiene el apoyo del Banco Mundial, trabajó con el macrismo y sus planes tienen la aprobación del G20).
Sus palabras se enfocaron en analizar el desarrollo individual del aprendizaje de los estudiantes en este sentido. Sin embargo, no propone herramientas para aplicarlo. En este sentido, las consignas de los materiales de lectura como la denominada “saquemos los trapitos al sol”, apuntan a relevar que es el docente el que es vago, que tiene poca vocación y que se queja de todo. Que somos los responsables de los bajos niveles de comprensión de los estudiantes y que seríamos “la herramienta” para que la educación en crisis pudiera mejorar.
Todos los gobiernos quisieron instalar la misma idea: que los docentes somos vagos, que trabajamos 4 horas y tenemos tres meses de vacaciones. Esto lo afirma desde Macri a Milei, hasta Cristina Kirchner en un discurso en el Congreso, muy repudiado. Todos dicen que debemos ganar bien, pero cada año nos pagan menos y a nuestras condiciones de trabajo las precarizan cada vez más.
Retomando las palabras de un director en una jornada, “los docentes y los estudiantes son los eslabones que menos responsabilidad tienen en la crisis de la educación”. O retomando a otro docente de una escuela de Capital, quien dijo “es muy linda la jornada, pero si no se cambian las políticas educativas, todo esto no sirve”. Lo que implica también un mayor presupuesto en salarios e infraestructura educativa.
En síntesis, la mayoría de las y los docentes vivieron la jornada como una instancia que aportó poco y que, por primera vez, se puso mucho más énfasis sobre nuestro trabajo, sin dar herramientas de cómo hacerlo.
Congreso pedagógico para decidir. Otro modelo educativo es necesario
Como nos tenía acostumbrado el gobierno de Uñac y el PJ, el gobierno de Orrego también baja propuestas educativas armadas en oficinas, sin consultarle a ningún docente. Nada bueno puede surgir para la educación de una propuesta pedagógica de un gobierno libertario, que solo ha recortado el presupuesto educativo y los salarios, en medio de una crisis social en la que tenemos estudiantes que comen una vez al día.
Para empezar a resolver la crisis educativa hay que comenzar por un aumento salarial para que ningún docente esté por debajo de la línea de pobreza. Hay que aumentar el presupuesto educativo al 10% del PBI. Recuperar el FONID y los fondos nacionales para los comedores, becas, material didáctico, bibliotecas y arreglos edilicios. Poner gabinetes interdisciplinarios en todas las escuelas y recuperar las viandas.
Para realmente cambiar la educación se tiene que convocar a un Congreso Pedagógico Provincial y también nacional, en el que docentes, familias y estudiantes puedan debatir y decidir sobre qué tipo de educación tenemos y cuál necesitamos.
Desde Alternativa Docente y el MST en el Frente de Izquierda Unidad, opinamos que con este conjunto de medidas podemos comenzar a encarar una verdadera transformación de la educación al servicio de la clase trabajadora y el pueblo.
El Estado puede recaudar y contar con dinero suficiente para llevar adelante esta transformación, a través del no pago de la deuda externa al FMI, aplicar fuertes impuestos a los ricos y eliminar los subsidios a la educación privada.
Es necesario tener una propuesta pedagógica de izquierda, que tenga como base la construcción de una sociedad más justa, crítica de este sistema educativo actual, que aboga por que nuestros estudiantes terminen siendo mano de obra barata para las multinacionales. Queremos un modelo educativo crítico, que se plantee construir otra sociedad. Más igualitaria, más humana, más solidaria, en definitiva, socialista.