El 8 de marzo a la mañana nos enteramos de que Akira Toriyama, el creador de Dragón Ball había fallecido a los 68 años el pasado 1 de marzo, y que había sido velado en la intimidad de su familia y luego cremado.
La mayoría de la juventud creció con Dragon Ball en sus casas y a muchos nos pegó duro el saber de su partida, porque nuestra infancia fue marcada por la serie.
Dragon Ball inicio
Corría el año 1984 y un joven Akira publicaba en la revista Shonen Jump el cómic de Dragon Ball, una historia que se basa en la leyenda del rey mono, que la llevaría un pequeño llamado Gokú proveniente del planeta Vegita, adoptado por Son Gohan “abuelito”. Al conocer a la adolescente Bulma comienzan a buscar las esferas del dragón, unas piedras mágicas que traerían al dios dragón, Sheng Long, quien les otorgaría un deseo.
Transcurrida la serie nos enteramos del origen de Goku, un guerrero Sayayin que pelearía en torneos y siempre terminaría por salvar el mundo de distintos aliens. También de Vegeta, su adversario y luego su compañero de lucha; Piccolo, que terminaría siendo su amigo y maestro de Gohan (hijo de Goku) y los villanos Freezer, Cell, Babidi y Majin Boo.
Luego vinieron Dragon Ball GT (no es canon porque Akira no estuvo de acuerdo con esa serie y no se involucró en el proyecto), Baby; y en lo último Dragón Ball Super, Golden Freezer (proyecto fue supervisado por Akira y Toei Animation, dibujado por el mangaka Toyotaro).
El 26 de febrero de 1986 se transmitió el primer episodio de DB en Japón. En 1994 ATC (canal 7) transmitía la serie, pero no fue hasta 1997 que llegó al viejo Magic Kids, canal para chicos. En plena época menemista, con una llegada muy fuerte de los animes, los chicos comenzaban a ver la televisión mientras una parte de la clase media comenzaba a sufrir los estragos de las políticas neoliberales.
La crisis explotó en 2001 y los chicos seguían eclipsados por la televisión por desconocimiento de lo que sucedía o porque los padres buscaban una manera de que no vieran las situaciones terribles del país y fue un gran catalizador para disociar la realidad, siendo que muchos medios terminaban criticando el anime para sacar el foco en problemáticas más importantes (Ranma ½) .
Dragon Ball creció a nivel mundial, con videojuegos, figuras de acción, películas, live action, etc. El anime en sí tenía mucha demostración de violencia y fue siempre marcado por su carácter conflictivo, usado como chivo expiatorio de los problemas sociales por la creciente violencia en colegios y en adolescentes. La realidad es que el anime solo mostraba explícitamente algo que ya estaba materializado en la sociedad hacía mucho tiempo.
Fue Dragón Ball que impulsó a muchos mangakas a inspirarse, como a Ichiro Oda (One Piece) y Masashi Kisimoto (Naruto) a dibujar/guionar.
La generación que más recuerda el anime es la de los ochenta y noventa, en plena democracia y tratando de disociar la realidad de políticas nefastas, las aventuras de Goku fueron nuestra compañía, por eso nos duele a muchos la partida del creador.
Su concepción política
Más allá de no se conoce la ideología política de Akira y hay leyendas que apuntan a que estaba en contra del estalinismo y el comunismo chino -haciendo un personaje llamado Oolong con un traje militar y una estrella en su gorra, un pervertido- Akira tenía una visión bastante proyanqui por la concepción de Goku como superman (cómic que se pone en contra del comunismo en la Guerra Fría).
A pesar de ello, en su historia demostraba que se necesitaba la unión de muchos para luchar y batallar, ganando sobre todas las adversidades para salvar el planeta de colonizadores extranjeros intergalácticos.
La historia de Goku nos inspiró a los jóvenes a seguir adelante y sus opening/ending nos motivaban con sus letras.
La última cancelación
Hace unos años atrás el Ministerio de la Mujer canceló la emisión de Dragon Ball Súper por una situación de acoso por parte del maestro Roshi. En ese momento el ministerio decidió retirar y editar DBS, esto trajo una caterva de personas furiosas con ideas liberfachas que mencionaban una clara apología de la prohibición. Lo que no sabían era que desde que DB se transmitió en América Latina fue editada en muchas partes subidas de tono, que fueron cortadas y no dobladas en latino (se pueden ver tranquilamente en YouTube).
La realidad es que Dragon Ball era para adolecentes/adultos, promulgaba muchas cosas positivas como luchar por los ideales, tener perseverancia y que sin compañeros no se podía modificar nada; pero también tenía un sesgo machista que no se aggiornó a el tiempo que vivimos, con los cambios sociopolíticos que se dieron con la tercer y cuarta oleada feminista.
Contradictoriamente, Toriyama comentó en su momento que solo podía crear personajes de mujeres fuertes en sus cómics, como Dr Slump con su protagonista Arale (que lo catapultó a la fama en Japón), mujeres que no se dejaban tocar y si sucedía eso terminaban defendiéndose.
Muchos crecimos con Dragon Ball y con sus contradicciones nos marcó. Akira Toriyama con sus contradicciones como todo ser humano, será recordado por toda una generación como el creador de Dragon Ball y lo seguiremos duelando como si esa parte de la infancia no existiera nunca más, porque nos acompañó en la infancia y llenó un lugar en nuestro ser.
Rocío García