Desde el MST-FIT-U, junto a nuestras compañeras y compañeros del Teresa Vive venimos siendo testigos de una lucha constante durante más de siete años, en el que se le reclamó, tanto al gobierno provincial como el nacional, el derecho a una vivienda digna en un contexto político, económico y social de crisis total y en el que ambos gobiernos tomaron la decisión de implementar un ajuste directo sobre los sectores más vulnerables.
Ya el gobierno anterior del PJ venía implementando una metodología de poco presupuesto para infraestructura y obras públicas, algo que como política siempre reclamamos.
Es un derecho que nosotros exigimos desde un primer momento, ya que está contemplado en el artículo 14 BIS de la Constitución Nacional, que establece que “todo aquel consta con los medios para la realización de una vivienda propia y adquisición de un terreno que debe ser asistido por el estado”. Esto es algo que no se cumplía en el gobierno anterior ni mucho menos con el gobierno actual de la Libertad Avanza, que eliminó el Ministerio de la Vivienda a nivel nacional, lo que llevó a un ajuste mayor, teniendo en cuenta que ya no se bajaba presupuesto ni para lo mínimo en infraestructura y obras públicas. Este gobierno viene remarcando los límites de una política de ajuste de miseria y de quita de derechos.
En Catamarca, más de tres mil familias están anotadas desde hace 25 años en el Ministerio de Vivienda y Urbanización en la cual, de todas ellas, ni siquiera la cuarta parte ha podido ser beneficiaria de una vivienda social. Lo mismo ocurre con otros tipos de vivienda en el que la metodología es a través del pago con un recibo de sueldo, a parte de un garante, lo que limita a muchas trabajadoras y trabajadores, debido a que los sueldos nunca superan la canasta básica, lo que quiere decir que tampoco algunos llegan a superar dos salarios mínimo vital y móvil (uno de los requisitos fundamentales para poder adquirir ese tipo de vivienda) y para poder pagarla con su trabajo esto conlleva que cada día, cada mes, cada año, se multiplique.
Incluso desde la asunción de Milei hasta la fecha, se ha triplicado la inscripción por vivienda social, ya que ningún trabajador ni trabajadora cubre sueldos dos sueldos para ser beneficiario de las viviendas, por lo tanto caen en el recuento de venir a solicitar una vivienda más accesible, que es algo que no se entrega desde hace más de siete años, como se dijo anteriormente.
Mientras tanto, el gobierno provincial prefirió entregar las viviendas rentables, dejando de lado e ignorando a las personas más necesitadas, aquellas que viven en un ranchito y que están asinadas en habitaciones de dos por dos. Muchos de ellos viven en situaciones inhumanas, cada viento que corre o cada lluvia que hay quedan totalmente desprotegidos a la intemperie.
Desde hace años nosotros venimos manifestando la problemática habitacional que hay y que lamentablemente creció de una manera abrupta en la provincia.
Seguimos pidiendo por la necesidad de poder hacer una inversión o recursos y así iniciar un plan de obras públicas con construcción de viviendas sociales y de esa manera también abrir la fuente de trabajo.
Nuestras compañeras y compañeros durante todos estos años se han organizado para luchar juntos y tener fuerza en cada movilización, cada acampe que se hizo, en el que aprendimos que no era un sueño, sino todo lo contrario, es un derecho negado por los gobiernos provinciales y nacionales a cientos y cientos de familias que aún continúan esperando por tener su casa propia.
Nuestra tarea, nuestro compromiso, nuestra lucha
Desde hace muchos años, el MST-FIT-U viene haciendo hincapié en las políticas concretas que se deben llevar adelante, no solo a través de un ministerio que esté a disposición de aquellas compañeras que sufren violencia de género, abusos sexuales y que muchas veces se ven desprotegidas por las leyes de género y, lamentablemente, muchas veces tienen que vivir con el violento o abusador porque no tienen un techo propio. El Estado no se hace responsable y no les da garantía de poder salir de donde conviven con sus agresores.
Las políticas concretas que planteamos en el MST- FIT-U son un plan de obras públicas que dé abertura a fuentes de trabajo, abertura a planes sociales, abertura de ayudas económicas para las mujeres y disidencias, así también como tierra y vivienda para todos.
¿De dónde deben sacar la plata para para todas estas políticas de estado? Es muy sencillo, primero se debe cobrar un impuesto a los más ricos, además de dejar de pagar la deuda con el FMI. Solo así alcanzarán los presupuestos para las viviendas y las obras públicas.
Por eso, nuevamente llamamos a todos a que se sumen al FIT-U para poder organizar la lucha. Somos un partido, que tenemos diputados, concejales, senadores a nivel nacional que no se venden en cada propuesta que va en contra de los derechos de las y los trabajadores, de la salud y educación, así como lo hizo la Libertad Avanza, y que el PJ apoyó, vetándole las leyes.
El único espacio que nunca se dio vuelta ni le dio la espalda a los trabajadores fue el Frente de Izquierda. Es por ello que este 26 de octubre en Catamarca también nos presentamos como una alternativa para todos los laburantes y queremos defender nuestros derechos en las calles y también en los recintos. Por eso, es necesario votar a nuestros candidatos del FIT-U: Alejandra Figueroa, Diputada Nacional; Soledad Martínez, Diputada Provincial y Diego Yapura, Concejal por la Capital.
Continuemos juntos la lucha por todas aquellas familias que aún esperan este derecho básico.
Alejandra Figueroa, dirigente MST Catamarca y candidata a Diputada Nacional