En el día de ayer, 28 de diciembre, se dio a conocer que el consorcio encabezado por Daniel Vila, José Luis Manzano y Mauricio Filiberti se hicieron de Edenor. Con una transacción valuada en U$S 100 millones por el 51% de las acciones, el grupo empresario que también cuenta con las acciones del Grupo América y el Grupo UNO -un holding de medios de comunicación que tiene en su haber una gran palestra de radios, prensa gráfica, digital y de cable de la provincia de Mendoza- ahora también se hace de la distribuidora de electricidad más grande de Argentina.
Los rumores de que el holding liderado por Marcelo Mindlin, Pampa Energía[i], vendiera la mayoría de sus acciones se confirmaron en el día de ayer después de tres meses de negociación. De esta forma Vila y Manzano pasan a ser propietarios de Edenor, empresa que tiene 3,2 millones de clientes, el 19% de la demanda total de electricidad en el país.
Según se supo por fuentes oficiales, el titular de Pampa Energía declaró que la venta se realiza para abocarse directamente a la práctica de producción no convencional de gas, donde invirtió US$ 250 millones para fortalecer su participación en el plan Gas.Ar; y a la finalización de la central térmica Ensenada Barragán, ubicada en provincia de Buenos Aires que cuenta con la operación conjunta de YPF.
De esta forma, el macrista Mindlin, quien no paró de enriquecerse y verse beneficiado con la gestión de Cambiemos, ahora cierra un negocio estupendo luego de que, antes de cerrar la venta, el Estado le haya transferido la suma de $ 3.143 millones como subsidios. Este año Alberto Fernández no solo felicitó públicamente a Mindlin por la creación de la Central Termoeléctrica Genelba de Marcos Paz, sino que siguió engrosando sus bolsillos con subsidios millonarios a Edenor, una empresa que brinda pésimos servicios a la mayoría de sus usuarios.
Vila, Manzano y Filiberti
Los nuevos dueños de la distribuidora más importante de energía del país cuentan con un expediente que va desde la participación política hasta, como advertimos, la posesión de multimedios.
Manzano, el nombre más resonante de los tres, fue quien tuvo una vida política antes de dedicarse a ser uno de los empresarios más resonantes del país. Por el Partido Justicialista fue diputado por Mendoza en la década del ‘80 y participó del gabinete del primer período del menemato como ministro del Interior. Posteriormente a su retiro, ya junto a Vila, se transformaron en pulpos de los medios de comunicación. Hoy su cadena de multimedios cuenta con canales como América y América24 (compartiendo la titularidad con Claudio Belocopitt, dueño de Swiss Medical Group), además de radios como La Red, diarios y demás negocios digitales referidos a la telefonía y servicios de internet.
Edenor no es un negocio desconocido para estos capitalistas, ya que también son dueños de Edemsa, la distribuidora eléctrica de Mendoza. Pero sí es un negocio de mayor magnitud.
El más desconocido de los tres es Mauricio Filiberti. Apodado como el Señor Cloro por ser el único fabricante del producto en el país y uno de los principales proveedores de la estatal AySA (proveedora del servicio de agua y cloacas en el AMBA, hoy dirigida por Malena Galmarini), luego de haber fusionado su empresa Transclor con la compra de la planta Clorox, hoy también se queda con Edenor.
La compra de Edenor por parte de estos nuevos megacapitalistas que no dejan nicho por explotar, no traerá las soluciones necesarias para la mayoría de los usuarios. Al igual que cuando estaba en manos de Mindlin, el servicio va a continuar en un estado deplorable, con cortes energéticos como moneda corriente. El nuevo tridente ya se frota las manos esperando la ola de tarifazos que el gobierno de Alberto Fernández piensa comenzar en marzo de 2021.
Los problemas de suministro de electricidad, así como la falta de agua y su mala calidad, el abastecimiento de gas y demás servicios públicos, son problemas que sólo se solucionan echando a los empresarios mencionados y no defendiéndolos como hacen todos los políticos tradicionales. Como indica el MST en el FIT-Unidad, hace falta un giro de 180° para que estos servicios sean considerados como derechos sociales, este giro se tiene que dar con la estatización de los mismos bajo el control de sus trabajadores y usuarios.
[i] Compañía más importante del país dedicada a la generación y distribución de energía eléctrica y de gas natural.