Ayer, lunes 6, un vecino de 62 años arrojó una bomba molotov en la habitación en donde vivían dos parejas de lesbianas, en un hotel familiar del barrio porteño de Barracas. Como resultado del incendio causado, las cuatro mujeres sufrieron graves quemaduras y una de ellas falleció, Pamela Cobos.
En el Hospital del Quemado se encuentran internadas Mercedes y Sofía, respectivamente con el 90% y 75% del cuerpo afectado, con mal pronóstico, en tanto que Andrea tiene quemaduras en la cara y en una mano. El hombre intentó suicidarse luego del ataque, pero sigue con vida.
Siembran odio, provocan crímenes
Nos causa dolor, indignación y repudio este brutal ataque lesbodiante, que no es casual. Como bien señaló en un comunicado la Federación Argentina LGBT, que nuestra agrupación integra: “No podemos dejar de señalar que los crímenes de odio son el resultado de una cultura de violencia y discriminación que se sostiene sobre discursos de odio que hoy se encuentran avalados por varios funcionarios y referentes del gobierno nacional”[1].
Esos discursos de odio que envalentonan a los misóginos y fachos son respaldados por la ofensiva antiderechos del gobierno de Milei, que elimina el INADI, el Ministerio de Mujeres y desmantela las pocas políticas públicas para la diversidad sexual y de género.
Además, varios funcionarios reafirman esta línea homofóbica oficial. La semana pasada, Nicolás Márquez, biógrafo de Milei, dijo que “cuando el Estado promueve, incentiva y financia la homosexualidad está incentivando una conducta autodestructiva”. Y tiempo atrás la canciller Diana Mondino comparó el matrimonio igualitario con tener piojos. Más que “opiniones”, en realidad son descalificaciones prejuiciosas e insultos que habilitan los ataques anti-LGBT+.
Milei ubica a las mujeres y al colectivo de la diversidad entre sus enemigos, al considerar privilegios lo que en realidad son derechos conquistados con años de lucha. Lo que llaman batalla cultural contra la ideología de género no es más que adoctrinamiento y reproducción permanente de violencia. El sistema capitalista y patriarcal, más aún con este gobierno de ultraderecha, ejerce un creciente ajuste y violencia, como también lo son el protocolo represivo de Bullrich y la Ley Bases de Milei.
Exigimos justicia ya
Según el Informe anual del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGBT+, a cargo de la Defensoría LGBT porteña y la FALGBT, en 2023 hubo 133 crímenes de odio por orientación sexual e identidad de género, más casos que en 2022[2]. También informa que el 88% de las víctimas son mujeres trans y travestis.
Repudiamos el brutal ataque a las parejas de lesbianas. Exigimos juicio y castigo al culpable y también a los responsables políticos cuyas palabras alientan la violencia. También reclamamos que se incorporen a la Ley Antidiscriminatoria nacional los pretextos de identidad de género y orientación sexual, que en el texto actual no figuran, y que haya penas para que tales actos no queden impunes.
Ayer lunes se realizó una reunión de organizaciones y mañana miércoles se definirá una acción conjunta de protesta, seguramente este viernes 10. Somos parte de esa movida y proponemos movilizar con la mayor unidad para denunciar toda esta violencia hacia nuestros cuerpos e identidades.
Traemos con nosotres una larga tradición de lucha, la suficiente como para identificar que lo sucedido en Barracas no es un hecho aislado. Por eso, a los fachos, a los violentos y por supuesto a este gobierno de Milei le decimos: nosotras y nosotres nos vamos a seguir besando, amando, visibilizando, existiendo y luchando por nuestros derechos. ¡Justicia por las víctimas! ¡Basta de discursos y crímenes de odio!
Mica Escobar – Libre Diversidad-MST
[1] https://www.instagram.com/p/C6pS2ywMqSa/?igsh=eG9vNnlocnR0dzQw
[2] Informe completo en https://drive.google.com/file/d/1MxCDJPPKscZFjIRkHmOng8VYotsUvt–/view