Este sábado 5 de diciembre desde Juntas y a la Izquierda y el MST empezamos a preparar motores para reactivar la marea verde. Entre otras actividades en Capital y el Gran Buenos Aires, a la tarde nos juntamos en el Parque Centenario, para difundir nuestra opinión sobre el debate en torno a la legalización del aborto y la defensa del proyecto de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto frente al proyecto del Poder Ejecutivo.
En plazas y parques conversamos con muchas personas, en especial jóvenes, que fueron parte de la marea verde en 2018 y que hoy tienen expectativas sobre cómo sería la legalización. En realidad, algunas ya conocían las diferencias entre ambos proyectos y otras no. Por eso explicamos que el proyecto oficial contiene limitaciones negociadas con la Iglesia como la objeción de conciencia individual y la penalización del aborto después de la semana 14.
En la de Parque Centenario y otras asambleas feministas profundizamos estos temas a fin de impulsar la movilización para rodear de nuevo el Congreso en los tres días verdes que se vienen. El miércoles 9 las comisiones emitirán su dictamen sobre ambos proyectos.
Por eso es clave movilizar con fuerza ese día para que se retire del proyecto oficial la objeción individual, pues si cada profesional de un hospital se declara objetor/a, de hecho es una objeción institucional. Hay que sacarla o al menos prohibir la objeción institucional, como estaba en la media sanción de 2018. También hay que quitar la penalización después de la semana 14 a quien aborte y a quien realice la práctica.
El jueves 10 se iniciará eldebate y el viernes 11 se hará la votación, por eso en las asambleas charlamos la importancia de redoblar esfuerzos para llenar las calles y lograr que el aborto sea legal, libre y sin restricciones.
Varias compañeras remarcaron que no nos conforma una ley que no represente la lucha de 15 años que se logró condensar en el proyecto de la Campaña, pues fuerza hay de sobra para defender lo que nuestro feminismo conquistó en las calles. Otras compañeras compartieron sus experiencias en la pelea de 2018 y como toda esta revolución de las pibas les cambió la perspectiva de vida. “El feminismo nos salvó por la solidaridad y porque nos ayudó a cuestionarnos cosas que antes parecían naturales”, se escuchó.
Desde Juntas y a la Izquierda extendemos nuestra invitación para movilizarnos juntas, juntes y juntos los próximos 9, 10 y 11 de diciembre al Congreso en defensa del proyecto de la Campaña, como otro paso en la pelea por nuestros derechos de género, por separar la Iglesia y el Estado, y por derrotar este sistema capitalista y patriarcal.