El pasado lunes el presidente Alberto Fernández, a través de un tweet comunicó que se había reunido con Andrés Rodríguez de UPCN para acordar la paritaria estatal hasta septiembre. Luego se supo que pusieron un tope del 33% acumulativo y en tres cuotas: 7%, 11% y 12% a cobrar a partir de julio.
Es un nuevo golpe al bolsillo de lxs estatales, no resuelve el reclamo salarial y echa leña al fuego del descontento, en un contexto de 120% de inflación interanual estimada y sin pronóstico de mejora. Los dirigentes sindicales ya no se gastan siquiera en hacerse los que negocian, aceptan migajas decretadas por redes sociales. Son la principal traba para dar la pelea por el salario, los pases a planta y contra el ajuste porque sostienen al gobierno y a Massa, garante de cumplirle al FMI a costa de que sigamos perdiendo lxs trabajadorxs.
Ingrid Urrutia, secretaria general de ATE INCAA y candidata a secretaria general por la Multicolor en las próximas elecciones en Capital, expresó: “Lxs estatales ya perdimos un 36% del salario y tenemos sueldos que no llegan ni a la canasta familiar que se calcula en $ 322.000, según ATE INDEC. La dirigencia sindical es cómplice del ajuste del gobierno. Así no va más”.
Además agregó: “Ambos sectores de la conducción de ATE tanto la Verde de Cachorro Godoy, como la Verde y Blanca de Catalano son responsables de no abrir los canales democráticos del sindicato para discutir y realizar medidas concretas para frenar este ajuste a nuestros salarios. Se pelean por la caja del gremio pero por arriba siguen apoyando al gobierno del Frente de Todos que es el que nos sigue hundiendo en la pobreza”.
Sobre las elecciones nacionales de ATE que serán el 9 de agosto, Urrutia manifestó: “Venimos de lograr un gran acuerdo con todas las agrupaciones independientes en ATE Capital y volvimos a presentar a la Multicolor a nivel nacional como el único espacio que enfrenta al gobierno y al FMI. Pero no alcanza con eso. Desde la izquierda proponemos organizarnos más allá de las elecciones y construir un modelo sindical opuesto al de la burocracia, que ponga por delante nuestros intereses, que sea democrático y abierto a todos los compañerxs, con perspectiva de género y de lucha para conseguir un salario digno, el pase a planta permanente y la discusión sobre qué Estado queremos y al servicio de qué proyecto político”.