Hoy, junto a Cele Fierro, Vilma Ripoll y Mónica Sulle, referente de nuestro MST Teresa Vive, participamos de una conferencia de prensa unitaria en el Obelisco, convocada por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, para exigir la libertad de dos dirigentes sociales detenidos arbitrariamente ayer en Jujuy: Sebastián Copello (Polo Obrero) y Juan Chorolque (MTR 12 de Abril).
Ayer, desde el mismo lugar, numerosas organizaciones políticas y sociales hicimos una masiva movilización hasta la cámara penal porteña, en la calle Libertad al 1000, para exigir la libertad de los tres compañeros detenidos por la protesta del 10 de marzo en Plaza Congreso contra el acuerdo gobierno-FMI: Jaru Rodríguez, Julián Lazarte (CUBA-MTR) y Oscar Santillán (MTR Histórico).
Ofensiva represiva
Si bien viene desde antes, a partir de que el Congreso aprobó el acuerdo con el FMI se intensifica una campaña política, jurídica y mediática en contra de la protesta social en general y en contra de los piquetes en particular. Es que a ambos hechos los une un nexo de hierro: el pacto con el FMI trae ajuste y ningún ajuste pasa sin represión. Y esa política antipopular incluye al gobierno nacional, a Rodríguez Larreta y a todos los gobernadores.
Al recorte a los derechos humanos básicos de trabajo genuino, salario digno, planes sociales y comida para los sectores más carenciados le suman ahora el ataque a los derechos democráticos de organizarse, manifestar y peticionar a las autoridades, o sea el derecho a la protesta, que a su vez es la única forma de conquistar y defender todos los demás derechos. En una palabra: los gobiernos quieren cagarte de hambre y que encima ni se te ocurra protestar.
Morales es un adelantado en esta ofensiva ya que hasta montó una justicia propia, totalmente adicta y distinta a los tribunales ordinarios, para criminalizar a quienes “atenten contra el Estado”, o sea a todos los reclamos sociales. Es un verdadero señor feudal, en cuya provincia se perdona a los grandes empresarios cómplices del genocidio, como Carlos Blaquier, mientras se persigue y encarcela a los pobres por luchar.
La agenda de Milei no pasará
Cuando el ministro nacional de Desarrollo Social Juan Zabaleta o el intendente porteño Larreta amenazan con quitarle la ayuda social a quien haga un piquete, lo cual además es ilegal, están jugando con fuego. Políticamente siguen el rumbo reaccionario de Milei, Espert y los “libertarios”, que la única “libertad” que defienden es la libertad del mercado capitalista mientras atacan todas las libertades del pueblo trabajador.
Pero estamos en un país con un 40% de pobreza, inflación galopante, salarios de miseria, 29.000 pesos de jubilación mínima, planes sociales de 16.000 pesos por mes y comedores comunitarios sin comida. ¿Cómo carajo pretenden que no haya marchas ni piquetes? ¡Va a haber cada vez más! ¡Ningún presidente, vicepresidenta, diputado, senador, juez, concejal ni funcionario político podría vivir ni un día en semejantes condiciones! Además, acá la clase obrera, la juventud y demás sectores populares tenemos una larga tradición combativa. Hemos resistido, enfrentado y derrotado cosas mucho peores, como la dictadura genocida. Y nadie se deja morir de hambre en silencio. Por eso el ajuste del FMI no va a pasar sin lucha. Vamos a seguir uniendo fuerzas con todos los sectores dispuestos a luchar por la libertad de las presas y presos políticos y hasta echar por tierra esta receta inhumana de hambre y palos que nos pretenden imponer.