La lucha que vienen dando las compañeras conductoras de colectivos, para dejar de ser discriminadas y poder trabajar a la par que los varones, comenzó a visibilizarse cada vez más. Esta lucha empalmó en las calles con otras peleas de género, como por ejemplo el 3 de junio pasado en el reclamo por Ni Una Menos en Congreso o en la pelea junto con los choferes autoconvocados, que varias veces cortaron distintas rutas y accesos a la CABA en reclamo por salarios, vacunas y sus derechos laborales.
El fallo judicial favorable a la compañera Érica Borda fue un puntapié para obligar al gobierno nacional, a través del Ministerio de Trabajo, a tomar acciones para que las patronales del trasporte contraten a mujeres siguiendo el criterio del cupo femenino del 30% mujeres. La realidad es que, a pesar del fallo Borda, las mujeres siguen siendo discriminadas por las empresas de colectivos que no les dan empleo y las discriminan por el sólo hecho de ser lo que son: mujeres.
Nuevo programa
En este escenario, el martes 29 de junio el gobierno nacional presentó el llamado Programa para la Promoción e Inclusión de Mujeres en la actividad del Transporte Automotor[1]. Su intención es “fomentar” que las patronales contraten a más mujeres como conductoras de colectivos. El nuevo programa surge luego de que la justicia, en el fallo de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo Borda Érica c/Estado Nacional-Ministerio de Trabajo s/amparo dispone que se reconozca el cupo femenino en el trasporte público de pasajeros, obligando al Ministerio de Trabajo a llevar un registro de mujeres postulantes y a controlar la efectiva contratación por parte de las patronales.
Acompañé como abogada a las compañeras conductoras que estuvieron presentes entre el público. En dicho evento, el gobierno se comprometió a generar políticas para la inclusión de las mujeres en el trasporte y celebraron un convenio entre los ministerios de Transporte, de Trabajo y la UTA, representada por el burócrata Roberto Fernández, para “fomentar” la contratación de mujeres. El sindicato también firmó el convenio.
Las conductoras nunca habían sido recibidas por la UTA. Al contrario: el sindicato nunca las respaldó y sólo fueron los cuerpos de delegados combativos como el de la Línea 60 y otros choferes autoconvocados quienes apoyaron la lucha de las compañeras. Ahora exigiremos a la UTA que atienda el reclamo de género como se debe y que acompañe con medidas concretas para que las mujeres conductoras puedan trabajar.
Se garantiza con lucha
El programa lanzado por el gobierno es, sin duda, un paso adelante fruto de la lucha consecuente de las conductoras. De todos modos, continúan los amparos judiciales para exigir la paridad de género y la contratación de mujeres, porque más allá de los anuncios oficiales de buenas intenciones siguen desocupadas por ser mujeres. Por eso se mantiene la organización y la lucha de las conductoras de colectivos para que las “buenas intenciones” se transformen en realidad hasta lograr la paridad de género también en el ámbito del trasporte.
El martes 29, desde el piso 16 del Ministerio de Trabajo, en la sede central de Alem al 600, se escuchaba la combativa batucada y el aguante de la militancia de Juntas y a la Izquierda y el MST para hacerles saber a los funcionarios que la lucha en la calle sigue. En la presentación pública del nuevo programa estuvieron los ministros Claudio Moroni (Trabajo), Alexis Guerrera (Transporte), Elizabeth Gómez Alcorta (Mujeres), la subsecretaria de Políticas de Inclusión Pamela Ares. Junto a una delegación de compañeras conductoras cuyos amparos patrocino y con Vilma Ripoll, fuimos recibidas.
Desde el gobierno se comprometieron a dar incentivos a las empresas de transporte que contraten mujeres. El compromiso oficial incluyó el costeo de los cursos y la licencia de transporte profesional LINTI por parte del Estado para las mujeres conductoras. Las compañeras, con nuestro apoyo, van a seguir muy de cerca el cumplimiento efectivo de estos compromisos para avanzar realmente que haya más conductoras al volante. Como bien lo sabemos, la única garantía de victoria es la organización y la movilización.
Mariana Chiacchio – CADHU-MST
[1] Resolución Nº 345/2021 del Ministerio de Transporte, 22/6/21.