Según el Ministerio de Salud de la Nación, en el día de hoy se contabilizaron 14.932 casos nuevos positivos para Covid 19 y 350 personas fallecidas. El total de infectados en todo el país asciende a 931.967. La muerte avanza con prisa y sin pausa siendo la suma de fallecidos 24.921. Actualmente hay 4.316 personas internadas en Unidades de Terapia Intensiva. La ocupación de camas en dichas unidades es del 64.1% a nivel nacional y 63,5% en el AMBA.
Las decisiones del gobierno argentino siguieron siempre la misma línea: privilegiar las ganancias capitalistas a la salud, flexibilizando así el aislamiento cada día y abriendo actividades no esenciales. La circulación de las personas que debieron salir a trabajar provocó una rápida propagación del virus, lo cual queda más que claro con la inmensa cantidad de contagiados: más de 900 mil. No hubo medidas económicas serias que garantizaran que las familias pudiesen permanecer en sus casas. El IFE resultó absolutamente ineficiente y al día de hoy miles de familias ya no contarán con ella. No se fortaleció un sistema de salud desfinanciado por éste y todos los gobiernos anteriores y se advierten las consecuencias ahora con las Unidades de Terapia Intensiva ya casi desbordadas. Hoy en CABA se abrieron los Shoppings ante la presión de comerciantes que desean vender para el día de la madre. Al mismo tiempo y para fomentar el turismo en vacaciones estivales el gobierno bonaerense aseguró que está evaluando hacer una prueba piloto en los dos próximos fines de semana largos. Así mismo ayer martes los estudiantes de la Ciudad de Buenos Aires volvieron al colegio de manera presencial, alumnos de séptimo grado de nivel primario y de quinto de nivel medio. Es decir, el desmadre está en puerta. Hay provincias con un índice de ocupación de camas de terapia intensiva que van desde el 85 al 100%.
Son los y las trabajadoras las que todos los días ponen el cuerpo en la calle y en los puestos de trabajo y quedan así a expensas de un virus potente, que hace carne de cañón de cuerpos estresados, mal alimentados y cansados.
La cantidad de muertos alrededor del mundo a causa de la pandemia supera el millón de personas y los contagiados son más de 38 millones. Estados Unidos lidera el ranking de naciones con mayor cantidad de casos, le siguen India, Brasil y Rusia. El foco principal de la pandemia se sitúa en América, donde los contagios siguen creciendo y los fallecidos ya superan los 600 mil.
El personal de salud fallecido asciende a 120, siendo más de 32.000 los que han contraído el virus en todo el país. El cansancio extremo hace que nuestros trabajadores hospitalarios estén al borde de sus fuerzas, ante jornadas largas y extenuantes, con dos o más guardias por semana para reemplazar a lxs compañerxs que están en cuarentena u hospitalizadxs. Enfermería sigue siendo el sector más afectado: 30 %, médicos 20% y luego siguen camillerxs y personal de limpieza.
¿Y el aumento para los trabajadores de salud?
Bien, gracias. Sí hubo dinero para engrosar fuertemente los bolsillos de la policía, a quienes el Estado necesita para reprimir cualquier resistencia o protesta callejeras de un pueblo harto que le mientan. Si hubo decisión política para bajar las retenciones del agro. En resumen: el gobierno sigue engrosando las ganancias del que siempre estuvieron bien y deja a la primera línea absolutamente desprotegida.
El reporte nacional es el siguiente:
Buenos Aires (5.175), CABA (825), Catamarca (8), Chaco (192), Chubut (236), Córdoba (1606), Corrientes (54), Entre Ríos (299), Formosa (1), Jujuy (103), La Pampa (101), La Rioja (87), Mendoza (925), Misiones (3), Neuquén (296), Río Negro (361), Salta (150), San Juan (5), San Luis (151), Santa Cruz (195), Santa Fe (2470), Santiago del Estero (153), Tierra del Fuego (295) y Tucumán (1241).
A 208 días del comienzo de la “cuarentena” desde el MST seguimos insistiendo denodadamente que es imperioso que el gobierno tome las medidas económicas pertinentes que necesita la población para poder quedarse en casa y realizar así una cuarentena real con las necesidades vitales cubiertas. Sin dilaciones se debe atacar de lleno la curva de contagios, cerrando toda actividad no esencial, testeando ampliamente y unificando el sistema de salud público y privado en uno solo de excelencia. Triplicar el presupuesto de salud en todas las jurisdicciones, subsidio universal al desocupado, prohibición de despidos con penalizaciones fuertes para quienes no lo respeten. Aumento de salario urgente para los y las trabajadoras de salud, aumentar los planteles sanitarios, elementos suficientes de protección, licencias para el personal de riesgo y reconversión industrial para proveer insumos y respiradores. Todas acciones más que posibles, si dejan de pagar la fraudulenta deuda o ponen un serio impuesto a la riqueza, no el chiste del “aporte solidario” a sólo 12.000 personas. Basta de falsas soluciones. Las responsabilidades no son individuales, son del Estado, quien deberá dar cuenta de todas las acciones y de las omisiones también.