jueves, 18 abril 2024 - 19:52

Feudalismo universitario. Elecciones de camarillas

Se dice mucho que la UBA ocupa tal o cual lugar en el ranking de las universidades de América o el mundo, pero poco se dice de su carácter antidemocrático que en estos días ha sumado un nuevo capítulo. En esta nota te contamos porqué los estudiantes cada vez tenemos menos participación en la vida cotidiana de nuestra universidad.

Miles de estudiantes venimos desde marzo del año pasado intentando adaptarnos a la nueva “normalidad”, con salarios de hambre, precarizades o desocupades, con limitaciones para acceder a la virtualidad y muchos de nosotres siendo rechazades en becas como el PROGRESAR, que tienen un monto muy bajo. La realidad es que todas estas condiciones han llevado a muches a la deserción, sobre todo a aquelles con más bajos recursos, es decir, una exclusión de clase.

Esto muestra que la crisis generalizada que se vive en nuestro país y el mundo repercute en la universidad y recae una vez más en quienes somos la gran mayoría, esto es, les estudiantes. Sufrimos en carne propia la precarización de la vida y la juventud y sabemos mejor que nadie qué políticas necesitamos dentro de las universidades para poder sostenernos. Pero resulta que nuestra voz no es escuchada ni tiene la necesaria representación en los organismos donde se toman las decisiones universitarias. Una expresión de esto es el llamado a elecciones de la UBA en medio de la segunda ola. Garantizar los cargos de poder de la gestión sigue estando primero que ocuparse de los verdaderos problemas que nos atraviesan a les estudiantes.

Queda claro que este sistema antidemocrático está al servicio de seguir recortando nuestro derecho a la educación. Las elecciones a las que están convocando, no solo nos relegan al no mencionar cuándo serían las votaciones estudiantiles, sino que siguen profundizando esta estructura irracional, donde somos las mayorías y quienes le damos sentido a la universidad les que tenemos menor representación en la estructura de gobierno. El truco de sostener este sistema feudal está en que nadie lo conozca, te contamos acá cómo se dan las elecciones de rector, decanes y consejeres.

Gobierno universitario: ¿autonomía, democracia y participación?

Para empezar, tenés que saber qué se vota en la facultad particularmente. Cada 2 años se votan les representantes estudiantiles para el Consejo Directivo de la facultad, que está compuesto por 16 representantes: 8 de les profesores, 4 de les graduades y 4 de les estudiantes, todos elegidos por votación directa. Y cada 4 años el Consejo Directivo de cada facultad elige a su decano y vicedecano, que son las máximas autoridades. Ah, un dato importante, los candidatos a decano y vice tienen que ser sí o sí profesores, es decir, ni graduades ni estudiantes pueden presentarse. Vos dirás: pero, ¿les estudiantes que somos mayoría en la facultad solo tenemos 4 representantes en el organismo de cogobierno y no elegimos de manera directa al decano? La respuesta es sí, y esto recién empieza.

El gobierno de la Universidad de Buenos Aires (UBA) está constituido por el rector -hoy Alberto Barbieri, quien oficia de ajustador de turno- y por el Consejo Superior que está compuesto por los decanos de cada una de las 13 facultades por y 5 representantes de cada uno de los tres claustros: profesores, graduados y estudiantes. Dato importante: el rector solo puede ser profesor de la universidad; de nuevo, ni graduados ni no docentes pueden postularse a rector. Es decir que en el máximo órgano de cogobierno, los estudiantes que somos mayoría en toda la universidad tan solo tenemos 5 representante de 24 integrantes. No por nada nunca se resuelven nuestros problemas reales.

Pero la cosa no termina acá. Vos te preguntarás: ¿y al rector quién lo elige? Bueno, el rector es elegido por la Asamblea Universitaria. ¿Y esto qué es? Es una asamblea compuesta por 236 representantes entre los cuales están los 15 miembros del Consejo Superior, 208 integrantes de los Consejos Directivos de las facultades y les 13 decanes. En esta asamblea deciden quién será el próximo rector de nuestra universidad. En resumen 308.748 estudiantes tenemos tan solo 57 representantes en la asamblea universitaria, cuando 28.232 profesores tienen 122 representantes, más del doble. Es tan burdo, que solo les representantes de profesores tiene la mayoría que alcanza para elegir al rector porque tienen holgadamente más de la mitad de los votos que hacen falta.

Una elección a espalda de les estudiantes

Ahora que ya conoces el manejo antidemocrático de nuestra universidad, tenés que enterarte lo que quiere hacer el rectorado que no para de superarse en sus decisiones anti estudiantiles. El 12 de marzo sacaron una resolución con las fechas para realizar las elecciones este año. Esta comunicación remarca que cada facultad debe renovar las autoridades antes del 31 de octubre en todos los claustros y elegir los decanos vicedecanos y consejos directivos para en noviembre conformar el nuevo Consejo Superior. Una vez realizado esto, el 10 de diciembre de este año se haría la asamblea universitaria para elegir al nuevo rector de la UBA.  Sí, todo esto cuando se transita la segunda ola, los casos siguen creciendo y las vacunas llegan a cuentagotas. Para Barbieri parece ser un detalle menor la pandemia.

Algunas facultades, a través de sus consejos directivos, ya empezaron a ponerle fecha a la elección de autoridades en los claustros de docentes y de graduados para los últimos días de junio y los primeros de julio como es el caso de Sociales. Mientras, les estudiantes tendremos que esperar para poder votar vaya uno a saber cuándo. Un dato no menor es que “la fiesta democrática” en cada facultad deberá ser organizada por les no docentes que hoy cuentan con salarios de miseria, y sin ninguna garantía protocolar, además de no tener participación en el cogobierno universitario. Cinismo nivel mil el de las autoridades.

Las conducciones de las que nada se esperaba, nada están haciendo

Las conducciones tanto de la FUBA (Alianza de la UCR- PJ) como las conducciones de los centros de estudiantes ligadas al kirchnerismo/Frente de Todos no han sacado ningún pronunciamiento concreto repudiando este hecho. Y vos dirás: ¿porqué, si ellos tienen que defender a les estudiantes? La realidad es que están más comprometidos en sostener el ajuste del gobierno en la universidad a cambio de algún cargo. Y no es extraño, estas conducciones tampoco dijeron nada frente el ajuste a nuestras condiciones de cursada, la exclusión en el ingreso, la permanencia y el egreso.

Este panorama nos obliga a cuestionarnos desde la izquierda cómo nos organizamos les estudiantes para frenarle la mano al gobierno y las autoridades, poniendo en pie herramientas realmente útiles para los desafíos que tenemos por delante. En esta situación, solo en unidad construyendo pisos de acuerdo con cada compañere independiente y todas las organizaciones dispuestas a luchar, podremos tener la fuerza y las herramientas para frenar a las gestiones y a las camarillas profesorales.

Por una gran campaña por la democratización de la UBA

Desde la Juventud Socialista del MST en el FIT-Unidad le proponemos al conjunto de les estudiantes y a las organizaciones que estén dispuestas a enfrentar esta situación iniciar una campaña por la democratización de nuestra universidad. Que parta por denunciar el carácter antidemocrático de la representación en los órganos de cogobierno que tenemos les estudiantes, que pelee porque sea una estudiante un voto y se elija de manera directa a nuestros representantes, que incluya a les no docentes en el consejo con una representación proporcional y que haya un único claustro docente. Queremos impulsar reuniones que coordinen, analicen y tracen un plan de lucha para nuestras facultades, que nos permita ganar pero que también debatan qué modelo de universidad queremos y necesitamos ante un modelo feudal caduco.  Eso solo puede ser construido por el conjunto del movimiento estudiantil, y no por acciones unilaterales de una u otra organización. Quienes defendemos la educación pública necesitamos ser escuchades y poder gobernar nuestra universidad.

Leo Rando y Luna Badaracco

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