lunes, 4 noviembre 2024 - 21:17

Belgrano Cargas. La privatización menemista de Milei

Atado a las consecuencias de la Ley Bases, el pasado miércoles el gobierno nacional dio a conocer el principio de las privatizaciones de las empresas que actualmente pertenecen al Estado, siendo el Belgrano Cargas el primer objetivo de los libertarios.

En una conferencia de prensa el vocero Presidencial, Manuel Adorni, acompañado del titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, Diego Chaher, comunicaron el destino de Belgrano Cargas y Logística Sociedad Anónima. Con los argumentos de siempre en relación al rol del Estado, el vocero justificó esta primera privatización con la idea de que la empresa es “obscenamente deficitaria”, y además finalizó su intervención redoblando la apuesta: “todo lo que se pueda privatizar se va a privatizar y todo lo que pueda pasar al sector privado va a pasar al sector privado”.

Por su parte Chaher se encargó de explicar como se llevará adelante el proceso privatista de la empresa que posee una traza ferroviaria de más de 7.000 Km., los cuales se extienden desde el noroeste hasta el centro del país. La privatización del Belgrano Cargas estaría atada a la instrumentación de siete procesos de concesión diferenciados, según lo explicó Chaer: “Una concesión por la vía con derecho a cobro de peaje que incluirá el traspaso de los empleados afectados a la misma; dos concesiones de locomotoras que permitirá incentivar la competencia que incluya a sus respectivos conductores; dos concesiones de vagones y dos concesiones de talleres que incluyan a los empleados asociados”. Un diagrama privatista en función de los reiterados pedidos de los sectores del extractivimso y del agro, los cuales hace tiempo viene exigiendo el control del transporte de sus productos.

La privatización, las concesiones o las ventas de las empresas se encuentran contenidas dentro del paquete de artículos que comprenden la Ley Bases, siendo Belgrano Cargas y Logísticas S.A. las primeras víctimas de este programa de entrega. Puntualmente, en el anexo VIII de la ley se encuentran habilitadas las privatizaciones de manera total de Ferrocarriles Argentinos y sus cuatro empresas públicas: Trenes Argentinos Capital Humano, Belgrano Cargas, Operadora Ferroviaria S.E. y la Administración de Infraestructuras Ferroviarias.

Lo que está implicado en la privatización

Esta empresa encargada de operar a lo largo de 7.600 kilómetros de vías, trazadas en 17 provincias y que se extiende desde el noroeste del país hasta los puertos del Gran Rosario, es uno de los sectores estratégicos en lo que se refiere al sistema productivo del país. Repitiendo a uno de sus ídolos, Milei retoma una de las medidas más criminales aplicadas por el menemismo, como fueron las privatizaciones que sufrió el sistema ferroviario en los 90.

Actualmente y según los datos de la Secretaría de Transporte, en Argentina los camiones cubren un 94% del transporte de cargas por vías terrestres y el 6% queda a manos de la red ferroviaria. Ese 6% restante está a cargo de Belgrano Cargas, la cual cuenta con una planta compuesta por 4.429 trabajadores, 11 unidades productivas y 8 talleres propios. Toda esa estructura quedaría en manos de los privados, donde los puestos de trabajos corren el riesgo de desaparecer.

En función a los puestos de trabajo y en línea a como vienen procediendo los sindicatos nucleados en la CGT, del lado de la Unión Ferroviaria, el más importante en este sector, lo previsible es que entregue al sistema ferroviario y a los trabajadores a la suerte de los planes de la empresa que se haga de Belgrano Cargas. Sergio Sasia, el secretario general de este gremio, es uno de los dirigentes sindicales que asiduamente se reúne con la Secretaría de Trabajo para negociar el achicamiento del sistema ferroviario del país.

Sasia se ha encargado de dejar en claro que se encuentra a favor de la privatización de este sistema, argumentando que un diagrama mixto generaría mejoras en el servicio. Además, en una entrevista que el dirigente dio en La Nación declaró: “si no somos inteligentes, va a quedar marcada una grieta muy fuerte en el movimiento obrero. Nos va a pasar la realidad por encima si no discutimos una actualización laboral”, dejando en claro su posicionamiento frente a este conflicto.

Con este anuncio por parte del gobierno parecería que hay episodios del menemismo que están dispuestos a volver a repetir. La destrucción de un extenso sistema ferroviario, la eliminación de miles de puestos de trabajo y hasta la desaparición de pueblos que vivían a costa del transito de los trenes fueron algunas de las consecuencias de las privatizaciones de Menem.

El gobierno ya amenazó con avanzar con este tipo de medidas y por esto es necesario ponerles un freno a estas políticas de entrega, sobre todo teniendo la experiencia y conociendo las consecuencias del menemismo a cuestas. Ante este panorama se vuelve clave la unificación de los sectores en lucha, acompañados de la más amplia unidad en la movilización para terminar con este programa de ajuste, entrega y represión.

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