Las fechas finales de presentaciones electorales se acercan y los diferentes espacios políticos definen sus candidaturas. Los liberfachos de Libertad Avanza, con Javier Milei a la cabeza, empezaron a fogonear ayer a quien parece que completará su fórmula presidencial. Se trata de Victoria Villarruel, la actual diputada nacional por los libertarios, negacionista del genocidio de Estado y defensora de la casta militar que cometió delitos de lesa humanidad.
La abogada antiderechos realizó cursos de formación en la Universidad de Defensa Nacional de Washington y en 2006 creó aquí el Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv): una institución en defensa de la dictadura genocida. Sostienen que los militares asesinos actuaron en una “guerra” y fueron víctimas de “atentados terroristas”. La militancia reaccionaria de Villarruel no se circunscribe a la Argentina, ya que busca revertir las condenas y avances democráticos logrados por el movimiento de derechos humanos, sino que hace giras por otros países promoviendo su odio de clase y militarista.
La postulación de esta mujer va en sintonía con la del actual candidato de Milei en Tucumán, Ricardo Bussi, hijo del genocida Antonio Domingo Bussi, jefe del llamado “Operativo Independencia” que causó cientos de asesinados y desaparecidos en esa provincia. Como se sabe, Milei en los ’90 fue funcionario del ex dictador. Ahora apoya a Bussi hijo, que en sus spots de campaña propone la libre portación de armas al mejor estilo yanqui. Como muestra de lo que son, en un reciente acto electoral la patota de Milei-Bussi violentó a periodistas y destrozó un stand del Frente de Todos.
A Villarruel también se la conoce por su desprecio al movimiento de mujeres. Fue una de las abanderadas del pañuelo celeste en la campaña reaccionaria contra el derecho al aborto. Además, al igual que su jefe político, es negacionista de otra evidencia científica: el cambio climático.
Milei y su gente mienten, de “anticasta” no tienen absolutamente nada:
- Defienden los intereses de la principal casta privilegiada en este sistema capitalista: los grandes empresarios, el FMI y el imperialismo.
- En todas las provincias hacen acuerdos electorales con lo peor de la vieja casta política argentina, referentes del PJ, la UCR, el PRO y demás punteros.
- Ahora con Bussi y Villarruel también pactan con otro de los peores sectores del autoritarismo represivo que asoló nuestro país: la casta militar.
Por eso no es casual que Milei elogie a Martínez de Hoz, el nefasto ministro de Economía de la dictadura militar, que impuso el modelo económico neoliberal que luego Menem repitió en los años ’90. Martínez de Hoz no sólo hizo crecer en forma exponencial la deuda externa y la dependencia, sino que también abrió el camino a la privatización de las empresas públicas a manos de multinacionales.
Si de “libertad” hablamos, los liberfachos de Milei son lo opuesto. Se unen con otros dinosaurios que niegan el genocidio. Quieren “libertad” para explotar aún más a los trabajadores, “libertad” para saquear aún más nuestros recursos, para reprimir las protestas sociales, para reventar la salud y la escuela públicas, para vender riñones o niños en el mercado al mejor postor.
Son gente que nos haría retroceder décadas y llevaría el país al desastre económico y al caos social, ahora con Villarruel como posible candidata.