jueves, 2 mayo 2024 - 05:38

Ácido y Argentino. Iorio entre el cielo y el infierno

A continuación compartimos una contribución de Santiago Franco

En la mañana del martes 24 nos sorprendimos con la temprana partida del creador del Metal en Argentina, Ricardo Iorio nos dejaba con 61 años en la lejana Coronel Suarez donde vivía hacía más de 20 años en el medio de la “inmensidad “como él decía. De personalidad fuerte, verborragica y hasta violenta mordiendo el pasto varias veces se ganó el lugar referente del metal en el país.
El cantante había creado en el año 1981 la primer banda de Heavy Metal de Argentina, v8 en alusión al poderoso motor de auto. Sus letras hablaban del hartazgo, la rabia contenida de los jóvenes con la realidad en el medio de una dictadura genocida y que era hora del “tiempo del metal que nada tenía que ver con el” Hipismo“ pacifista, letras como Destrucción y Muy cansado estoy comenzarían a transformase en himnos en el primer disco histórico de la banda llamado Luchando por el Metal.


Atravesando todo Limite
Llegando a la década de los 90 Iorio decide terminar con su primer banda y crea en 1988 Hermética, la banda de culto que sería una resistencia durante la década menemista, los que alguna vez escucharon algún tema van a entender porque digo que fue una banda de culto y también de resistencia, la pluma de Ricardo entra en su mejor momento para mostrar la situación de nuestro país, donde decían que había una fiesta a la cual nunca fuimos invitados.
Temas como “Gil trabajador», “ Victimas del vaciamiento“, «Tu eres su seguridad», “La Revancha de América» mostraban el sentimiento de miles de jóvenes que sufrían todos los días lo que el modelo del neoliberalismo hacia entre ellos. Despidos, cierres de ferrocarril, persecuciones de la cana en democracia, contaminación y la explotación por “un mísero sueldo» eran moneda corriente para la época.
En el metal nunca se había visto una claridad semejante para describir situaciones, historias o simplemente contar sentimientos de lo que pasaba. Ricardo comenzaba a mezclar folklore con metal, algo nunca visto y decide grabar temas como Si se calla el cantor de Horacio Guaraní o el tango Cambalache de Disepolo.
Zamba de la resurrección
Cuando Hermética parecía que tocaba el cielo con las manos, Iorio nuevamente decide comenzar de cero por segunda vez, en 1995 forma Almafuerte, en honor al Poeta Pedro Palacios.
La primera parte de su nueva banda mantendría la línea de Hermética a nivel letras, el pibe tigre o sentir indiano seguían describiendo la situación de los jóvenes en el país y de cómo sobrevivían los pueblos originarios.
También comenzó a tener más letras ligadas al hombre de campo y de las rutas argentinas que el tantas veces tránsito.
Sería la banda que más duro en su trayectoria como músico, almafuerte llego a los 20 años en vivo.
La ultima etapa de su carrera lo mostro corriéndose claramente a derecha con mensajes u opiniones totalmente contrarias a las que el mismo levantaba cuando era más joven, ese iorio que tiraba comentarios machistas , misóginos y encontra del aborto fue el que ultimamente se vio ligado a personajes o políticos de lo más rancio del país Como el Nazi de Alejandro Biondini o Victoria Villarruel, Defensores de los genocidas y negadores de los 30.000 desaparecidos y pareciera que olvido del que “sale a ganarse un hueso como changarin de un trompa extranjero que compra el país».
Pero ese cambio que hace Ricardo equivocadamente no tiene que hacer perder de vista su legado poético y musical. Hoy quiero despedir a ese poeta, decidor y cantor argentino que represento con su ronca y gastada voz a tantos que parecían que nunca serian escuchados, los jóvenes, los trabajadores y los que soportaron las décadas mas oscuras de este país y no se resignan a seguir luchando contra este sistema perverso. Llego la hora del descanso de Iorio que se nos fue “sin un adiós sin un hasta luego” pero que se trasforme no solo en leyenda del Metal Argentino sino también del Rock Nacional.

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