El Domingo pasado en la 49° edición de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, la reconocida escritora nicaragüense, Gioconda Belli, presentó su último libro “Un silencio lleno de murmullos”. Una novela que es quizá el libro de mayor impacto político debido a las reflexiones que provoca y la denuncia de actualidad que contiene contra la dictadura de Ortega y Murillo, pareja dictatorial que gobierna Nicaragua hace 18 años.
Desde su segundo exilio, la autora se ha convertido en los últimos años en una de las voces que permiten derribar la censuray llevar la denuncia de las violaciones a los DDHH y la total falta de libertades democráticas que convierten a Nicaragua en un país cárcel. Mientras miles nos vemos obligados al exilio y cientos son desterrados,existe una especie de impotencia ante las narrativas manipuladas y la influencia mediática que sostienen la desinformación en el mundo sobre lo que realmente pasa en Nicaragua.
Un silencio lleno de murmullos es una novela que ha decir de Gioconda, sin proponérselo como eje, expone la situación en Nicaragua cuestionando la deriva autoritaria del FSLN como conducción de la revolución nicaragüense de 1979 y convirtiéndose en una herramienta para recuperar la esperanza. Aborda desde la intimidad de la relación madre e hija, las complejidades de una generación que supo enfrentarse a la dictadura somocista, pero vio truncado el sueño de una revolución social que tuvo impacto a nivel mundial. La autora aporta desde su experiencia personalenriqueciendo las reflexiones del exilio de dos generaciones comprometidas con el cambio social.
Junto a compañeros Nicas exiliados en Argentina acompañamos su presentación, donde los murmullos realmente rompieron el silencio. Más de un centenar de presentes pudieron conocer la realidad que atraviesa nuestro país. Esto es una labor que debe masificarse, contra los intentos de pactos y conciliaciones que pretenden llevar adelante los grupos de poder económico de Nicaragua, la denuncia desde abajo y a la izquierda es urgente. A como invita el libro y lo hizo Gioconda de forma explícita:¨esta novela tiene que trascender barreras y llegar hasta el último rincón de Nicaragua, porque es una invitación a no perder la esperanza. ¨

Al cierre de la presentación logramos intercambiar un momento con Gioconda y reconocer que hace un año nuestra compañera Fabiola Tercero fue detenida y desaparecida por la dictadura, simplemente por ser promotora cultural y difundir literatura critica de forma auto gestionada. Que mejor momento para exigir por su apariciónque un evento de esta dimensión.
A 7 años de la rebelión de abril de 2018, que encontró a una generación de jóvenes (muchos, hijos de aquellos guerrilleros que derrocaron a Somoza), el exilio puede convertirse en una oportunidad paraencontrarse con otros pueblos, sus organizaciones y sus luchas, recuperando lo mejor del Internacionalismo del cual se nutrió la Revolución Nicaragüense. Los esfuerzos de quienes decidimos seguir siendo coherentes en defensa de los DDHH y nos organizamos, pueden potenciarse con la solidaridad internacional de los pueblosque en medio de la crisis mundial es un polo en crecimiento, contra el ajuste económico y el autoritarismo.Nicaragua, desde el exilio, tiene una gran oportunidad. Hay que aprovecharla: Nicaragua nos convoca.